La reina del merengue, Milly Quezada, confesó en el programa Acceso Total de Georgna Duluc que aunque fue residente por años en la ciudad de New York, nunca pudo concretar la compra de algún inmueble o casa en su tierra, cuando intentó le quedó un mal sabor en la boca. Debido a esta situación siempre se queda en casa de Pedrito Núñez y su esposa que son como hermanos para ella.



A sus 59 años admite tener una vida intensa, llena de pasión tanto en lo personal y laboral, disfrutando lo que hace, sin olvidar que fue el sueño de Rafael Núñez su esposo quien visualizo todo lo que ha vivido ahora después de su muerte.

Dijo  que el haber trabajo junto a Juan Luis Guerra fue maravilloso, pero es un hombre perfeccionista, al decir que si para grabar el duo junto a ella al tener muy poco tiempo libre, por su gira “A Son de Guerra”, exigió que la selección de temas fuera los más concreta posible y que lo temas no pasaran de 5 para poder escoger el tema que cantarían a dúo, lo que ayudo y aporto fue que Yanina Rosado, su directora musical lo conociera también que la selección del tema, no tuviera contratiempos.



La salida de Yocelyn su hermana de la agrupación fue duro, porque además de hermanas eran 15 años de unión musical, que con tan solo mirarse sabía lo que la una le decía a la otra. Pero Dios la preparo para que con la partida y muerte de su esposo Rafael ella fuera el remansó y el refugio y la palabras que ella necesitaba en ese momento tan fuerte de su vida.

Los intentos por tener una relación han sido fallidos, no resultan porque al final no entienden su carrera y pesa más el hecho que sus hijos ante todo ocupan el primer lugar y eso no es negociable.Esta situación sentimental ha sido dolorosas porque a través de esas relaciones, pudo volver a sentir mariposas en el estomago, la ilusión de estar enamorada. Pero es una mujer que en términos de relación y enamoramiento es chapada a la antigua, en relación a los hombres los dominicanos son los que se han robado su corazón.

Ha tenido momentos de pensar en el retiro, dedicarse hacer otras cosas, le encanta la televisión.

No le gusta que le digan o la llamen abuela, prefiere que le digan ’’Nini”, pero disfruta a plenitud a sus nietas.

Con la viudez aprendió a manejarse sola a nivel financiero, a viajar sola y estar en plena soledad disfrutar de ella. Pero está completamente convencida que no quiere tener una vejez sola, sino compartir con alguien a quien contarle todo lo transcurrido en el día.

Cuando se rumoro que shakira grabaría merengue, pensó que la llamarían a ella y no al cata ni mucho menos grabar merengue urbano.

Sorprendió a su anfitriona al manifestarle que no le gusta escucharse y mucho menos el tono de su voz al cantar.

Le encanta escuchar a Chayanne, Marcos Yaroide, Lily Goodman.

Por ahora no grabaría un disco cristiano, porque le gusta ser coherente con lo que dice y lo que hace.