En la República Dominicana asistimos a un estadio de violación permanente de los derechos de la mayoría. La democracia representativa no está representado la voluntad popular en tanto no legisla en favor de los interéses del soberano y solo defienden los compromisos particulares de los representantes y los diferentes sectores de poder.



Los últimos acontecimientos en la vida de la nación nos indican que hemos llegado a la crisis última de un modelo económico y social agotado, que deja fuera de las prioridades del país los aspectos básicos que nos aseguran la formación de una sociedad justa en la que prevalezca la igualdad, la solidaridad y el respeto a la dignidad humana de nuestros ciudadanos.

En este sentido las y los jóvenes Libertarixs hemos decidido al conmemorarse  el 167 aniversario de la Constitución de la República Dominicana, hacer una toma pacífica y simbólica la Escuela República de Argentina con el objetivo de llamar la atención de los y las dominicanas de denunciar el sistema de ilegalidad que se impone desde el Estado el cual crea un ambiente de incertidumbre en la población, promocionando la inseguridad jurídica, una crisis de representatividad y la violación de los derechos consagrados en la Constitución.



Asimismo, requerimos del Estado dominicano el cumplimiento en lo inmediato del artículo No. 197 de la Ley General de Educación 66-97 que otorga al sector el 4% del PIB o el 16% del presupuesto nacional, el que sea mayor de los dos para el próximo año.

Abogamos por la mejoría de la calidad educativa soportado en la dignificación del oficio docente, su profesionalización y mejores condiciones salariales.

Adicionalmente exijimos el acondicionamiento de este plantel educativo, que por más de una década ha estado esperando la promesa de los arreglos por parte del Ministerio de Educación. Mientras tanto alrededor de 800 estudiantes de niveles medio y de básica toman clases en condiciones físicas deplorables.

Durante nuestra permanencia en este plantel estaremos acondicionando algunas de las aulas, además de trabajar en propuestas de transformación que incorporen a la comunidad en el rescate de este centro de estudios.

Es el Estado y el gobierno dominicano los que nos han llevado a esta acción en la que rompemos con el sistema establecido para cuestionar socialmente las actuaciones de los diferentes poderes que de manera permanente violan las leyes promulgadas por ellos mismos.

¿Qué podemos esperar de nuestro país si el Ejecutivo y el Congreso en lugar de cumplir la ley la violan y la irrespetan de manera descarada? ¿Con que calidad moral nuestras autoridades pueden exigirnos el cumplimiento de los códigos legales establecidos?

Queremos llamar a la sociedad a la reflexión sobre estos cuestionamientos y que pensemos cual debe ser el papel que debemos jugar en la defensa de nuestros derechos y la institucionalidad.

Entendemos que por estas y cientos de razones más los reclamos no deben parar, porque hasta ahora la realidad ha demostrado que la movilización popular y la denuncia permanente son el único motor de cambio y transformación.

Por Lxs Libertarixs