SAN FRANCISCO. El rey de los jonrones en las Grandes Ligas de béisbol, Barry Bonds, fue sentenciado este viernes a 30 días de arresto domiciliario y dos años de libertad condicional por obstrucción a la justicia en una investigación federal por consumo de esteroides.



El extoletero de los Gigantes de San Francisco también tendrá que realizar 250 horas de servicio comunitario, según decidió un juez en San Francisco.

Bonds, de 47 años, fue hallado culpable en abril de obstrucción a la justicia al entregar respuestas evasivas, lo que dificultó una investigación de un gran jurado en el 2003 sobre el consumo de esteroides en el deporte estadounidense.



La jueza Susan Illston también le impuso a Bonds una multa de 4.000 dólares tras ser hallado culpable.

Illston postergó la aplicación del castigo mientras se dilucida el proceso de apelación que podría demorar más de un año. La fiscalía quería que el retirado pelotero pasara 15 meses en prisión.

El jonronero es uno de los grandes nombres que se vieron involucrados en un escándalo por distribución de esteroies por los laboratorios BALCO.

Bonds, que no juega desde el 2007 y no oficializó su retiro de los diamantes, conectó un récord de Grandes Ligas en una temporada de 73 jonrones en 2001. También rompió el récord de 756 que poseía Hank Aaron como máximo jonronero de las Mayores, al terminar su carrera con 762 vuelacercas.

Su nombre, con el de los exgrandesligas Roger Clemens y Mark McGwire, son sinónimos de la famosa «era de los esteroides» en el béisbol norteamericano.

Ese período, de los años 90 a principios del 2000, vio romperse numerosas marcas y forzó a las Mayores a establecer una política antidopaje más rigurosa.

La Gran Carpa podría ahora pasar a ser en marzo la primera Liga deportiva principal de Estados Unidos con pruebas para detectarse la hormona de crecimiento humano.

Recientemente, el dopaje volvió aparecer en las Grandes Ligas cuando Ryan Braun, de los Cercveceros y MVP (Jugador Más Valioso) de la Liga Nacional en la temporada anterior, dio positivo a la testosterona en octubre e incurre en una suspensión de 50 partidos.

La juez Illston también presidió varios pleitos derivados del caso Balco.

En 2008, había condenado a un año de arresto domiciliario al exinstructor de atletismo Trevor Graham, que dio inicio al descubrimiento del escándalo suministrando a las autoridades antidopaje estadounidenses una jeringuilla que contenía uno de los productos dopantes del laboratorio.

La exvelocista Marion Jones, una antigua alumna de Graham, es en realidad una de las raras personalidades en haber ido a prisión, ya que pasó seis meses en la cárcel y se les quitó las cinco medallas olímpicas conquistadas Sídney-2000.

AFP