Con frecuencia, los hombres tienen dificultades para interpretar correctamente el nivel de interés que una mujer siente por ellos, halla un estudio reciente.
Esto no sorprenderá a ninguna mujer que haya pasado tiempo en el mundo de las citas. Cierto tipo de hombre tiende a pensar que todas las mujeres lo desean, mientras que otros simplemente parecen incapaces de detectar las pistas.
El estudio incluyó a 96 hombres y 103 mujeres estadounidenses que asistían a la universidad, que participaron en un ejercicio de «introducciones aceleradas» que conllevaba hablar durante tres minutos con cinco miembros del sexo opuesto.
Antes del ejercicio, los participantes calificaron su propio atractivo, y fueron evaluados en cuanto a su deseo de un encuentro sexual a corto plazo. Tras cada conversación, los participantes calificaron a la otra persona en una variedad de medidas, que incluían el atractivo físico y su interés sexual percibido.
Los investigadores hallaron que:
Los hombres que deseaban un encuentro sexual a corto plazo eran más propensos a sobrestimar el deseo que una mujer sentía por ellos.
Los hombres que creían que eran «guapos» también pensaban que atraían a las mujeres, pero los hombres que en realidad eran considerados atractivos por las mujeres no pensaban de esta forma.
Mientras más atractiva resultaba una mujer para un hombre, más probable era que éste sobrestimara el interés de ella.
Las mujeres tendían a subestimar el deseo de los hombres.
El estudio aparece en una próxima edición de la revista Psychological Science.
«Como hombre, se pueden cometer errores de dos formas», señaló en un comunicado de prensa de la revista la autora del estudio Carin Perilloux, psicóloga del Colegio Williams de Williamstown, Massachusetts. «Puede pensar que la mujer realmente está interesada en él, cuando resulta que no es así. Eso conlleva cierto costo», como pasar una vergüenza.
El otro error masculino es no darse cuenta de que la mujer sí está interesada.
«Se pierde una oportunidad de apareamiento. Esto tiene un costo inmenso en términos del éxito reproductivo», explicó Perilloux.
En términos de la evolución humana, es probable que los hombres que sobrestimaban su atractivo para las mujeres y las perseguían incluso a riesgo de ser rechazados tenían más probabilidades de reproducirse y pasar este rasgo a sus descendientes genéticos, sugirieron los investigadores.
Fuente salud.univision.com