La incertidumbre generada por la amenaza de proliferación nuclear y el calentamiento global hizo que la asociación Boletín de Científicos Atómicos adelantara de un minuto su cuenta regresiva para el apocalipsis, informaron el martes científicos internacionales.



El simbólico Reloj del Apocalipsis «indica ahora cinco minutos antes de la medianoche (cuando se produciría el cataclismo nuclear)», declaró Allison Macfarlan, presidente de la asociación de la universidad de Chicago (noreste de Estados Unidos), que en 1947 creó el péndulo para ilustrar la inminencia de un cataclismo nuclear.

En enero de 2010, Boletín de Científicos Atómicos, que cuenta entre sus elementos 18 premios Nobel, retrasó de un minuto la cuenta regresiva, argumentando un «estado del mundo más prometedor». En ese entonces, el Reloj del Apocalipsis indicaba seis minutos antes de la medianoche.



«Hace dos años, parecía que los dirigentes del mundo podrían responder a las amenazas planetarias que enfrentamos, pero esta tendencia no se mantuvo e incluso se invirtió», constató Allison Macfarlan, también profesora de la Universidad George-Mason, en Virginia (este), quien precisó que el péndulo regresó a la posición que tenía en 2007.

Lawrence Krauss, copresidente de la asociación y profesor de física de la Universidad de Arizona (suroeste) justificó el adelanto del reloj al evocar «los peligros claros e inminentes de proliferación nuclear y cambios climáticos, así como la necesidad de encontrar fuentes de energía seguras y durables».

En conferencia de prensa, estimó que los «dirigentes del planeta demuestran inacción ante problemas clave como el cambio climático y las crecientes tensiones internacionales».

Para este científico, «el major desafío de la supervivencia de la humanidad en el siglo XXI es satisfacer las necesidades energéticas para el crecimiento económico de los países en desarrollo e industrializados, sin dañar aún más el clima y sin seguir alimentando la proliferación nuclear».

Jayantha Dhanapala, miembro de Boletín de Científicos Atómicos y exembajador de Sri Lanka ante la ONU, explicó que «pese a la promesa de una nueva forma de pensar en Estados Unidos y Rusia, el camino hacia un mundo sin armas nucleares es incierto».

En total, cerca de 19.500 armas nucleares están desplegadas en el planeta.

Sin embargo, Kenneth Benedict, director general de Boletín de Científicos Atómicos, fue más optimista y aseguró que la asociación está entusiasmada por «la primavera árabe, los movimientos ‘Occupy’ y la contestación política en Rusia».

«El poder del pueblo es esencial para afrontar los desafíos de energía nuclear, resolver los males que resultan del calentamiento climático que generan las actividades humanas y evitar un conflicto nuclear en un mundo inestable», agregó.

Desde que fue creado en 1947, el Reloj del Apocalipsis ha sido ajustado 19 veces.

AFP