PEKÍN. Apple anunció el viernes la suspensión de la venta del nuevo teléfono portátil iPhone en sus tiendas chinas por problemas de «seguridad», tras incidentes ocurridos durante su lanzamiento, para el cual miles de clientes esperaron largas horas en el frío invernal.
«La demanda ha sido increíble y las reservas de nuestras tiendas en China se han agotado», según el comunicado publicado por la tarde, que precisa que el iPhone 4S sigue estando disponible por internet y en los concesionarios autorizados.
«Desgraciadamente, no pudimos abrir nuestra tienda de Sanlitun (en Pekín) a causa de la muchedumbre», explicó Apple.
Un portavoz de Apple precisó que la venta de todos sus modelos de iPhone, y no sólo los del último modelo 4S, había sido suspendida en los Apple Store de China: tres en Shanghai y dos en Pekín.
El éxito de los teléfonos portátiles de la marca norteamericana es tal que los disturbios estallaron el viernes frente a la tienda del barrio capitalino de Sanlitum, donde unas mil personas había esperado en vano varias horas en temperaturas glaciales para ser las primeras en comprar el iPhone 4S.
«Hemos esperado aquí toda la noche. No es justo», declaró a la AFP Tom Sun, un joven de 18 años. «Estamos furiosos porque esta empresa nortemamericana nos dijo que abriría sus puertas a las 07H00», agregó.
«El iPhone 4S es el mejor de Steve Jobs, es por eso que quiero uno. Me enojaré mucho si no abren las puertas», declaró por su parte Li Tianye, de 29 años, agregando que había viajado durante dos días en autocar para encontrarse en Pekín durante el lanzamiento.
Enfurecidos, los clientes chinos arrojaron huevos contra la fachada de la tienda, donde el último modelo de la marca iba a comenzar a venderse a partir de las 07H00.
La policía intervino para pedir a la gente que se dispersara, explicando que finalmente el iPhone no sería puesto a la venta inmediatamente. Los clientes frustrados arremetieron entonces contra un guardia de seguridad de la tienda, constató la AFP.
Algunas personas declararon que habían pagado 100 yuanes (12,35 euros) a revendedores para ocupar su lugar en la fila de espera.
Sin embargo, mientras la situación era caótica el viernes de mañana ante la Apple Store cerrada, otros clientes compraban el último modelo de iPhone en un comercio de productos electrónicos situado justo debajo por unos 50 euros más, o sea 5.388 yuanes (663 euros) en lugar de 4.988 yuanes (614 euros) por el modelo menos caro (16 gigaoctetos).
La situación era más tranquila en Shanghai (este), donde las multitudes se agolpaban en los negocios de Apple, constató la AFP.
Ante el comercio de la avenida Huaihai en la antigua concesión francesa, hacia las 10H00 del miércoles se había comenzado a formar una fila de espera en la cual ya había unas 3.000 personas al atardecer.
A pesar de que su lanzamiento oficial en China continental recién se produjo el viernes, el iPhone 4S ya estaba en venta en el mercado negro desde octubre, importado ilegalmente desde Hong Kong, Japón o Estados Unidos.
En China hay más de 500 millones de internautas, 340 millones de los cuales tienen acceso a la web mediante su teléfono portátil, anunció el miércoles Gao Xinmin, un responsable de la Sociedad Internet de China.
AFP
