A través de los años, la televisión dominicana ha tenido diferentes etapas y quiénes las han representado, obviamente tomando en cuenta la circunstancia y modelo que cada una de ellas ameritan.
Muchas han sido las personas y personalidades que al pasar de los años se han caracterizado por el buen manejo y comportamiento del sin lugar a dudas uno de los principales medio de comunicación del ámbito electrónico en la historia de la propia comunicación.
Rafael Corporán de los Santos ha sido una de esas grandes personalidades que han pasado por la televisión, logrando con ello posicionarse en el más profundo interés del pueblo dominicano con un estilo propio y diferente.
Es preciso resaltar que Corporán también viene de la radio, donde acumuló la mayor experiencia y agilidad necesaria para lograr convertirse, posteriormente, en uno de los emblemas televisivos por más de dos décadas.
El no solamente se caracterizó o se ha caracterizado por la comunicación, sino también por las grandes colaboraciones y ayudas que realizaba a aquellos que las necesitaban, recordando en cada uno de ellos, su propia infancia humilde.
No es ni fue, en la comunicación, una persona de un notorio intelecto, pero sí de dolor por la injusticia que acostumbramos ver a diario sin descanso y sin dolientes, y en desmedro de la sociedad misma y también de la pobreza.
Lamentamos mucho de que en esta misma semana surgieron algunas informaciones en las redes sociales, dando cuenta, falsa por cierto, de un supuesto fallecimiento de este gran hombre, que lo único que ha hecho es crear y dar oportunidades a nuevos talentos, sin importar de dónde venían, ideología o creencia como tampoco sexo.
Nos sentimos honrados escribiendo este artículo, no sólo por cumplir y punto, sino porque con él le hacemos el reconocimiento que está a nuestro alcance y porque les hacemos saber a usted, como lector, cuán importante ha sido la trayectoria de otra de nuestras principales figuras.
Somos de opinión que la historia de la radio y la televisión no se pueden escribir obviando el gran trabajo realizado por él, que no solamente se limitó a dar oportunidades a animadores y animadoras, sino hacer crecer y hacer realidad el sueño de muchos pequeños, iniciando por “Sábado Chiquito”.
Los sábados, desde las nueve de la mañana (9:00 a.m.) hasta las ocho de la noche (8:00 p.m.), parte de una nueva generación creció haciendo suyo este kilométrico espacio, familiarizándose así con la propia dinámica Color Visión.
Entre otras figuras de la televisión y la radio, Corporán de los Santos tiene y ha reunido méritos para recibir un homenaje como este y mucho más. Allá estaremos con Dios.
Por el periodista Robinson Galvez Lay