Tras hacerse pública su separación, llegó el momento de la repartición de los bienes que tenía en común con su ex pareja: un patrimonio que oscila los 33 millones de dólares y que la mexicana piensa defender con uñas y dientes. Varias mansiones en Miami, México y España, un automóvil, un yate e incluso un jet privado son algunos de los bienes que la ex pareja deberá dividir, según publica la revista In Touch.

Tal vez por eso, pese a que están tratando de llevar el tema con la mayor naturalidad posible, el asunto de la repartición ya está en la Justicia. Según la web de noticias Vanitatis, que entrevistó a fuentes cercanas al entorno de Nicolás Vallejo Nágera, las cosas entre ambos no pueden ir peor.



Parece que el gran problema reside en los problemas de liquidez de la cantante. «Ella tiene deudas y su situación actual no es nada venturosa. Él sólo quiere lo que es suyo y lo que no lo es, pues no lo pedirá», recoge la web.

Al parecer, Vallejo Nágera reclamó su parte ante el juez asegurando que tuvo que dejar sus negocios propios para ser el asistente de su ex esposa, lo que contribuyó a incrementar la fortuna de la mexicana. Sin embargo, ella y su madre no piensan lo mismo y aseguran que él vivía a costa de la artista.



El entorno del hombre salió en su defensa ante tales acusaciones argumentando que aunque la empresa que montó en Madrid no funcionó, la de Miami fue muy productiva. Además, alegaron que si él renunció a algo fue porque Paulina le pidió que la siguiera «a todas partes como un perrillo faldero».

Fuente Infobae.com