PARÍS. Un simple análisis de sangre puede salvar vidas ayudando a los médicos a diagnosticar rápidamente si una paciente con cáncer de seno en su primera etapa enfrenta un riesgo de muerte o de reincidencia después del tratamiento, indicaron especialistas el miércoles.



Las células tumorales en una muestra de sangre, cuando son analizadas en la etapa inicial del mal, permiten pronosticar acertadamente las probabilidades de supervivencia de la paciente, señalaron los miembros de este equipo en el diario The Lancet Oncology.

Este hallazgo podría ayudar a identificar rápidamente a las pacientes para las cuales sería beneficioso recibir un tratamiento adicional como la quimioterapia.



«La presencia de una o más células tumorales en circulación (CTCs, en la sangre) pronostica una temprana recidiva y una supervivencia general inferior», dijeron los investigadores del Centro Médico Anderson para el Cáncer de la Universidad de Texas.

Cuantas más CTSs encuentren, mayor será el riesgo de muerte.

En general no se acostumbra a realizar análisis de sangre de CTC para efectuar un pronóstico del paciente o prescribir un tratamiento, ya que en general se cree que los tumores cancerosos se diseminan a través del sistema linfático, y no en el torrente sanguíneo.

Este equipo realizó tests en 302 pacientes tratadas en el centro entre febrero de 2005 y diciembre de 2010.

Las pacientes estaban en las primeras fases del cáncer de seno –antes de que se extendiera hacia otras partes del cuerpo– y no habían recibido quimioterapia.

Este equipo encontró CTSs en la cuarta parte del grupo.

De las que tenían células tumorales en la sangre, una de cada siete tuvo una recidiva después del tratamiento y una de cada diez murió durante ese período.

En cambio, las pacientes cuyos análisis de sangre no mostraron CTCs tuvieron una tasa de recidiva de 3% y una tasa de decesos de 2%.

«Para las pacientes con una concentración más elevada de CTCs, la correlación entre la supervivencia y las tasas de progresión fue aún más radical, con 31% de esas pacientes que murieron o tuvieron recidivas», indicó un comunicado de prensa que acompañó el estudio.

Investigaciones anteriores mostraron resultados similares en pacientes con cáncer de seno que ya tenían metástasis o que se habían diseminado. El nuevo estudio afirma que puede mostrar que «no es necesaria una enfermedad avanzada para que las células cancerosas se diseminen (a través de la sangre) y comprometan la supervivencia».

Otros pidieron prudencia, afirmando que la investigación recién comenzaba, y solicitaron estudios clínicos más amplios.

AFP