Un paradisíaco lugar ubicado en la localidad de Llanes, en el norte de España, deja boquiabiertos a los visitantes.
Se trata de una playa con aguas cristalinas y arenas doradas, emplazada en medio de un verde prado. Y para hacer más mágica la experiencia aún, este mini balneario incluso tiene olas.
De acuerdo a Daily Mail, ésta debe ser de la playa más rara del mundo y aunque es difícil resistirse a la tentación de darse un chapuzón, advierten que sus aguas son bastante frías.
Cabe destacar que este lugar se alimenta del agua salada del Golfo de Vizcaya, en el Mar Cantábrico y durante millones de años, sus olas han erosionado una serie de túneles que pasan por debajo de los acantilados que conectan a la playa.
Gulpiyuri se esconde en medio de una serie de colinas que se sitúan a más de 100 metros de distancia del mar y a pesar de ser difícil de encontrar, se ha convertido en una atracción para cientos de turistas.
