Reportaje de Felipe Eusebio Vizcaino
Siendo Estados Unidos, uno de los países más poderosos del mundo, es difícil pensar que miles de personas viven bajo niveles de pobreza y otros tanto bajo la pobreza extrema.
La ciudad de New York no escapa a esta realidad, viendo el número de personas sin hogar (homeless) crecer de una manera sorprendente en los últimos años. Las causas y factores para este gran aumento de desamparados son variados, desde los conocidos problemas económicos como el desempleo, perdidas en inversiones, bancarrotas, etc. etc., hasta problemas de tipo personal tales como divorcios, rompimientos amorosos, problemas con los padres o problemas mentales.
Según datos obtenidos del ayuntamiento de NYC, para el año 2000 la cantidad de personas durmiendo en los denominados refugios era de 27,000, llegando casi a duplicarse para el 2012 con unos 43,082.
Los desamparados están distribuidos de la siguiente manera:
10,332 familias enteras sin hogar
17,247 niños
15,787 adultos casados
10,048 solteros
7,516 hombres solteros
2,532 mujeres solteras
De estos datos podemos sacar que los niños son la población mayor de desamparados y que los hombres, ya sea solteros o casados, constituyen un grupo muy numeroso.
Además de los factores antes mencionados, del porque muchas de estas personas están sin hogar, es bueno destacar que muchas de estas personas viven así por su propia decisión, son personas que no les intereso llegar a ningún lugar a nivel académico o económico y decidieron vivir en las calles, consiguiendo ayuda de personas y del gobierno, la cantidad exacta es difícil de conseguir, puesto que para recibir ayuda no pueden decir que la causa de vivir en la calle fue por decisión propia, ya que no recibirían ayuda alguna.
La forma de vida en los Estados Unidos, y principalmente en la Ciudad de New York, empuja a muchas personas a cometer errores que luego no pueden escapar tan fácilmente, ya que entre los norteamericanos cuando una persona no ha podido conseguir ciertas cosas se les considera fracasados, esto es muy importante que se entienda, ya que la presión social ejerce una fuerza tremenda, creando las condiciones para meterse en problemas económicos mas allá de los que puedan controlar.
