LONDRES. La final de 400 metros vallas será uno de los platos fuertes del lunes en los Juegos Olímpicos de Londres-2012, donde se hablará español por dos de los grandes aspirantes al oro, el puertorriqueño Javier Culson y el veterano dominicano Félix Sánchez.
Éste último afronta a los 34 años su última final olímpica y lo hace no sólo con misión de figurar, sino con opciones reales de llevarse la victoria, sobre todo después de conseguir el sábado, en las semifinales, la mejor marca anual de la distancia con un tiempo de 47.76, superando por tres centésimas el mejor crono anterior de 2012, que tenía Culson (47.79).
A pesar de ello, es el puertorriqueño quien parece partir con más opciones, avalado por dos las dos últimas platas mundiales (Berlín-2009 y Daegu-2011) que quiere convertir por fin en oro y tras una gran temporada, en la que se ha confirmado como la estrella de la distancia.
En el Mundial del pasado año, ‘Superman’ Sánchez fue cuarto y Culson segundo, a la sombra del campeón, el británico Dai Greene, que intentará coronarse en casa pese a los problemas para clasificarse para la final, ya que sólo fue cuarto en la serie ganada por el dominicano, pero accedió como uno de los repescados por mejores tiempos.
Culson admitió en Londres que tiene una cierta presión ante la responsabilidad de conseguir el oro, que sería la séptima medalla de la historia de Puerto Rico en Juegos Olímpicos, pero la primera dorada y la primera en el atletismo.
«Tengo algo de presión porque todo mi país me está mirando, esperan mucho de mí. Puerto Rico no ha logrado nunca una medalla olímpica en atletismo y yo quiero ser el primero», comentó la estrella boricua.
Por su parte, Sánchez, oro olímpico en Atenas-2004 y dos veces campeón mundial (Edmonton-2001 y París-2003), no consigue un gran resultado en una gran cita desde la plata de Osaka-2007.
El año pasado, eso sí, subió al podio en los Panamericanos de Guadalajara, para recoger un bronce en su prueba favorita, y se siente con fuerzas para lograr algo grande en el Olímpico de Stratford.
«Creo que puedo bajar de 48 segundos, no tengo duda de eso, pero creo que con 48 no se gana medalla, hay que correr por lo menos 47.80 o 47.50», declaró Sánchez tras su semifinal.
Entre los grandes adversarios en la pugna por el oro se presenta el propio Greene, que ya demostró la potencia de su sprint final en esa recta maldita para Culson en Daegu-2011, y los estadounidenses Kerront Clement (plata en esta prueba en Pekín-2008, campeón mundial en 2007 y 2009) y Angelo Taylor, defensor del título tras su oro hace cuatro años en la capital china.
AFP
