Santo Domingo. El presidente de la Asociación Dominicana de Industrias Textiles (ADITEX) consideró como inminente la desaparición de ese sector, al igual que la pérdida de miles de empleos debido a la descontrolada y creciente importación de bienes usados



El doctor Ricardo Koenig ve como una urgencia nacional la aplicación definitiva de la Ley 458-73, ratificada por el DR-CAFTA, que prohíbe la importación de ropas usadas y prenderías, en todas sus formas de empaque.

Koenig entiende que esta actividad causa daños en las áreas judicial, salubridad, seguridad nacional, comercio, industria y las recaudaciones del Estado Dominicano.



El dirigente empresarial expresó que el volumen de importación de estos productos aumentó en tan sólo seis años un 1,093%, el cual calificó como “un monto increíble y dañino para cualquier sector”.

“La importación de más de 22 mil toneladas métricas al año con estos bienes son un indicativo de que estas operaciones pertenecen a grandes empresas, creando una competencia desleal que lentamente va en detrimento de toda la industria nacional, debido a la presentación de valores y gravámenes cuestionables desde todos los puntos de vista”, precisó el doctor Koenig.

Los impuestos pagados por toneladas métricas por estos empresarios han decrecido un 236% en los últimos años. La aplicación de esta ley será un paso importante para sincerizar definitivamente los contrastes en nuestra economía, donde la idea de informalidad que tiene un enorme peso y la transparencia se diluye disfrazada de necesidades y conveniencias.

Koenig agregó que “la medida no solo es aplicar la ley 458-73, sino también hacer los correctivos para evitar el desmantelamiento del aparato productivo nacional y el perjuicio irreversible al comercio formal dominicano”.

“Nuestra Constitución establece el derecho de igualdad, los empleados de los sectores industrial y comercial son también dominicanos, igual de humildes, con las mismas necesidades, compromisos e ilusiones de progreso, que los vendedores de ropa usada y prenderías”, apuntó Koenig.

El presidente de ADITEX dijo que “no se puede seguir utilizando el chantaje y la politiquería para justificar la destrucción del sector productivo nacional, que genera miles de empleos a través de fábricas textiles, calzado y del comercio. Desafortunadamente, ya muchos han perdido sus puestos de trabajo y otras decenas de miles viven con el mismo riesgo”.

Por último reconoció el esfuerzo de la Dirección General de Aduanas por su responsabilidad de tomar medidas para controlar esta práctica desleal e ilegal que evita el ingreso de miles de millones de pesos a las arcas del estado.

Por Oscar López Reyes / Enver López Milander