Durante la experiencia de 12 meses de duración, se quedó en su casa, confeccionó su propia ropa, se abstuvo de tener relaciones sexuales e incluso de tocar a su marido.



Una mujer de 31 años de edad pasó un año entero tratando de seguir las instrucciones de la Biblia para las mujeres que menstrúan, según informó el portal Acceso 365. Estas prácticas abarcan desde “someter” a sus maridos, hasta autoexcluirse de la comunidad. Para ilustrar su experiencia, ahora editará un libro llamado “Un año de feminidad bíblica”.

Rachel Held Evans, residente en Tennessee, se dispuso a obedecer las reglas estrictas de la Biblia para las mujeres durante el período, incluidas en los capítulos 15 a 18 de Levítico. El Libro Sagrado establece un estricto conjunto de reglas para las mujeres, algunas explícitas, otras implícitas, y Evans trató de obedecer la mayoría de ellas con la mayor precisión posible.



Durante la experiencia de 12 meses de duración, se quedó en su casa, confeccionó su propia ropa, se abstuvo de tener relaciones sexuales e incluso de tocar a su marido, se dejó crecer el pelo, durmió en una tienda de campaña una vez al mes, e incluso se le hizo costumbre llevar un cojín de asiento dondequiera que fuera para evitar sentarse en sillas afuera de su casa.

Rachel explicó que a través de su experimento intentó poner de manifiesto un punto importante: todos los cristianos optan por respetar aquellas partes de la Biblia que les conviene. Y las que no les gustan, no.