Nuevo furor de la web es la fotografía de un niño con los ojos de color zafiro realizada por la fotógrafa Vanessa Bristow quien tomó contacto con él mientras buscaba a su perro. Al verla conversando con su madre, el niño se le acercó dejando relucir sus hermosos ojos.
Al publicarla en Internet, hubo una avalancha de comentarios diciendo que la foto era retocada y que se trataba de un efecto hecho con el programa Photoshop. Pero no, la foto es real.
Un especialista explicó que el niño probablemente tuviese albinismo ocular o albinismo Nettleship-Falls, una condición hereditaria en la cual los ojos carecen de pigmento o melanina, a pesar de que el cabello y la piel tienen coloración normal o casi normal.
«Cuando vieron la foto pensaron que se trataba de un efecto del Photoshop, pero no, es real.
De acuerdo a lo publicado en contexto.com.ar, a los pocos minutos de publicar la imagen mágica, hubo una inundación enorme de comentarios, había quien sospechaba, dudaba y hasta calumniaba francamente acerca de la autenticidad de la imagen. «Este es un photoshop descarado«, dijeron algunos, «es una farsa», dijeron otros», declaró Bristow.
Además, agregó: «Siempre me sorprende cómo la reacción de algunas personas a una foto en el Internet es negativa, no estoy segura de lo que es calificar una imagen ‘real’ o ‘retocada’, pero muchos de los comentarios afirmaron que la foto tenía todos los signos del photoshop». Lo cual no era cierto.
