José Peguero 
Santo Domingo. La Procuraduría Fiscal del Distrito Nacional, a través de su Departamento Línea Vida, recuperó en la mañana de este sábado a la señora Paola Carolina Martínez, de 30 años de edad, quien se encontraba en estado de ocultamiento y secuestro por parte de su pareja, Omar Roberto De La Cruz Reynoso.
La procuradora fiscal Rita María Durán, directora de Línea Vida, recibió la denuncia a través de la periodista Alicia Ortega. En una labor de inteligencia de la Dirección Central de Investigaciones Criminales (DICRIM), se logró ubicar la dirección de la señora Paola Carolina Martínez, por su número de teléfono.
Inmediatamente, un equipo integrado por fiscales y policías se dirigieron a la Urbanización Cristo Salvador, provincia Santo Domingo, donde se encontraba acompañada de su pareja, lográndose el rescate.
“No puedo hablar”, era la respuesta que daba Paola Carolina a las autoridades cuando intentaban comunicarse con ella. Según su madre, recibía maltratos de manera constante.
La joven víctima reiteró a las autoridades, que desde hace mucho tiempo es víctima de violencia por parte de su pareja y que mientras la tenía oculta, en su propia casa, la golpeaba. No le permitía realizar ni recibir llamadas telefónicas. Además le tenía prohibido las visitas de familiares y vecinos.
El señor Omar Roberto DeLa Cruz Reynoso será procesado judicialmente por violencia de género, secuestro, actos de torturas y barbarie, por el Departamento de Violencia de Género, Intrafamiliar y Delitos Sexuales, de la Fiscalía de la Provincia de Santo Domingo.
AFP 
Amaury Mo
Diooos y todavia se ven esos casooosss donde hay mujeres que se dejan dominar asi por completo, hay que trabajar muchisimo mas que el 4%…..
Muerte a la bestia apocalíptica que tenia a esta pobre mujer en cautiverio.
Energúmenos así no merecen la vida, vino al mundo a comerse la comida que le hace falta alimentarse, y que de seguro es mas productivo que esa gárgola maldita.
Que no lo maten con balas ni con ahorcamiento, ya que las balas y la soga cuestan, que se lo arrojen a los felinos que quedan en el zoológico.