Incluso un consumo de alcohol moderado durante el embarazo puede afectar negativamente al coeficiente intelectual (CI) de un niño, advierte un estudio reciente.
Algunas directrices desaconsejan consumir cualquier cantidad de alcohol durante el embarazo, mientras que otras sugieren que beber de forma moderada podría ser seguro. Y estudios anteriores han arrojado resultados conflictivos sobre los efectos que un consumo moderado de alcohol en la madre puede tener sobre el CI del niño.
Este nuevo estudio incluyó a más de 4,000 mujeres de Reino Unido que proveyeron información sobre su ingesta de alcohol durante el embarazo. Se evaluó el CI de los niños cuando tenían ocho años de edad.
Los investigadores hallaron que cuatro variaciones en los genes que metabolizan el alcohol en los niños se relacionaban firmemente con un CI más bajo. En promedio, el CI de un niño era casi dos puntos más bajo por cada cuatro variantes genéticas que tenían.
Ese efecto solo se vio entre los hijos de mujeres que eran bebedoras moderadas (de una a seis copas por semana) durante el embarazo. No se observó en niños cuyas madres no habían bebido durante el embarazo.
Esto sugiere que la exposición al alcohol en el útero fue lo que llevó a las diferencias en el CI de los niños, apuntaron los investigadores de la Universidad de Bristol y de la Universidad de Oxford.
El estudio no incluyó a las mujeres que bebían empedernidamente durante el embarazo.
Los hallazgos aparecen en la edición del 14 de noviembre de la revista PLoS One.
«Nuestros resultados sugieren que incluso a niveles de consumo de alcohol que normalmente se consideran como inocuos, podemos detectar diferencias en el CI infantil, que dependen de la capacidad del feto de eliminar el alcohol. Se trata de evidencia de que incluso a esos niveles moderados, el alcohol influye sobre el desarrollo cerebral del feto», apuntó en un comunicado de prensa de la Universidad de Bristol la autora principal del estudio, la Dra. Sarah Lewis.
El Dr. Ron Gray, líder del estudio, de la Universidad de Oxford, añadió que «se trata de un estudio complejo, pero el mensaje es sencillo: incluso las cantidades moderadas de alcohol durante el embarazo pueden tener un efecto sobre la inteligencia futura del niño. Las mujeres tienen un buen motivo para elegir evitar el alcohol durante el embarazo».
Aunque el estudio mostró una asociación entre el consumo de alcohol de la madre y el coeficiente intelectual de un niño, no demostró causalidad.
Fuente HealthDay News (Holadoctor.com)