Cuando encuentras a la persona que te hace sentir los más bellos sentimientos, es muy probable que no cueste tanto la decisión de unirte con ella para toda la vida. Además, seguramente hayas leído nuestros consejos para bodas para saber si estás lista para casarte y cómo saber cuándo casarte.
Insisto que el matrimonio no es una decisión que debe tomarse a la ligera. No es solamente cuestión de decidirse y sobrevivir a los nervios de los preparativos de la fiesta. El matrimonio implica luchar contra la rutina y saber convivir con los defectos y virtudes del otro. Es lograr ser uno, sin perder la propia individualidad.
A continuación, en imujer.com te presentamos las 4 habilidades que necesitas tener antes de casarte y de esa manera lograr un exitoso matrimonio.
Controlar las emociones
Para que la relación sea perdurable, hay que aprender a controlar las emociones y los sentimientos. Esto no significa que no demostremos nuestras emociones sino evitar que afecten negativamente a la relación. Debemos controlar especialmente la ira ya que nos puede llevar a lastimar sentimentalmente a nuestra pareja. Muchas veces éstas heridas no curan o llevan a la pareja a no dirigirse la palabra por meses.
Buena comunicación
Decir las cosas con tacto, si herir al otro, y escuchar son las dos mejores maneras de sustentar la relación en pareja. Hablar de una manera hiriente, quejarse o criticar todo el tiempo sólo llevará a problemas en la pareja. Hacer caso omiso a lo que tu pareja dice, negar lo que escuchas o siempre con una objeción, seguro causará más de un problema.
Resolver los conflictos
Todas las parejas tienen diferencias pero sólo logran ser exitosas aquellas en que sus miembros saben hacer de dos caminos individuales uno en común. Hay que ser lo suficientemente maduro para saber cuándo ceder, por ejemplo en pequeñas cosas como el color a elegir para pintar el dormitorio. No necesariamente todo debe ser discutido, mucho menos si esto genera discusiones de pareja que afectan negativamente a la relación.
Ser positivo
Ser positivo, regalar una sonrisa a la persona amada o reírse de sus bromas aportan un importante condimento a la relación. Son pequeñas acciones que posibilitan una vida feliz en pareja.
Por más bella que sea la fiesta de boda, dura sólo un día mientras que el matrimonio es para toda la vida. Estos consejos son útiles para tenerlos en cuenta tanto si estás por casarte como si ya hace unos años que llevas recorriendo el camino del matrimonio. Si se trata de alimentar la relación de pareja, nunca es tarde para leer nuestros tips sobre cómo revivir tu matrimonio.