Un joven agente le obsequió un calzado a un hombre que vive en la calle; una turista retrató el momento y la fotografía se reprodujo rápidamente en las redes sociales.
El frío esa noche se sentía en cada parte del cuerpo. Larry De Primo, un joven policía de Nueva York, transitaba las calles, cuando su mirada se cruzó con la de un indigente que no sólo no tenía cobijo sino que además tenía los pies desnudos. Fue un instante en el que no dudó: el agente compró unas botas y se las entregó. La respuesta fue inmediata: al hombre se le dibujo una gran sonrisa en el rostro y le dijo que nunca antes había tenido unas.
El gesto no hubiese trascendido de no haber sido porque una turista de Arizona, Jennifer Foster, se sorprendió al ver al policía acercarse al hombre y agacharse para ponerle las botas, ya que éste tenía dificultades para poder hacerlo, y retrató el momento.
La mujer, que también se desempeñó como policía durante 17 años, dijo en declaraciones a la prensa, que el oficial no esperaba nada a cambio y no notó que estaba siendo fotografiado. informa lanacion.com.ar «Nunca me impresionó nada tanto», reconoció. Para ella, el gesto de De Primo es «un recordatorio» de la razón de ser de los policías.