ANKARA. La apacible aldea de Sirince, en el oeste de Turquía, cerca de la antigua ciudad griega de Efeso, recibe desde hace semanas centenares de personas porque, según los milenaristas, no se verá afectada por el apocalipsis previsto el próximo 21 de diciembre.
En Sirince, de 600 habitantes, se produjo la asunción de la Virgen María al paraíso y por ello estaría a salvo del fin del mundo gracias a los fluidos positivos que atraviesan la localidad, según los milenaristas.
Los hoteles ya tienen completamente colmada su capacidad de 400 camas, indicaron fuentes locales.
«Es la primera vez que esto sucede durante el invierno», indicó a la prensa Ilkan Gulgun, un hotelero de la localidad.