José Peguero 
El ojo derecho de la ingeniera Francina Hungría, quien recibió un disparo en la cara durante un atraco, no tenía ninguna posibilidad de recuperarse, aseguraron ayer los oftalmólogos que la atendieron en el país, tras negar mala práctica y asegurar que actuaron apegados a los protocolos existentes.
Los doctores Máximo Genao Bisonó y Nelson Mañón Castillo, quienes atendieron a la paciente en el Centro de Medicina Avanzada Abel González, donde fue llevada de emergencia el pasado 23 de noviembre, explicaron que el ojo derecho de la paciente presentaba un estallido del globo ocular con ausencia de córnea, iris, cristalino, úvea, vítreo y retina y que solamente tenía alrededor del 70% del cuerpo escleral del óvulo (del cascarón).
Señalaron que, bajo esas circunstancias, era imposible que la paciente tuviera visión del mismo, porque cuando la recibieron ya estaba vacío. Al referirse al ojo izquierdo, explicaron que presentaba una perforación que iba de la parte superior a la parte inferior con exposición de su contenido por lo que procedieron a su suturación para darle oportunidad de que pudiera recuperarse.
Los detalles fueron ofrecidos en una rueda de prensa en la que participaron además, el presidente de la Sociedad Dominicana de Oftalmología, doctor Jaime Núñez Guerra; el maxilofacial Donald Hurtado, y el abogado de la familia Hungría, José Martínez Brito, entre otros especialistas. Hablaron con los medios de comunicación para “desmentir rumores que se han ido tejiendo en el país, hablando de mala práctica médica”.
Fuente Listín Diario
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