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Buenos Aires fue el mediodía del lunes un horno con 50 grados Celsius de sensación térmica en el verano austral, que mantuvo a la mayoría de los porteños atrincherados en sus casas, informó a la AFP el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).



La sensación térmica, que indica el nivel del calor que se siente cuando la humedad relativa se suma a la temperatura real, llegó a los 50 grados Celsius sobre el mediodía de este lunes, dijo la pronosticadora de turno del SMN, quien aclaró que los datos son tomados de una estación automática que figura en la página web del organismo.

La temperatura real, que no mide esos parámetros, llegó a 35,5 grados Celsius a esa hora, dijo la especialista del SMN, que pidió no identificarse.



La experta explicó que recién el miércoles, cuando se cotejen las estadísticas, se sabrá si ese guarismo es récord, aunque los meteorólogos de los canales de televisión dicen no recordar una temperatura tan elevada en los últimos años.

Sólo unos pocos agobiados peatones que ultimaban sus compras para Navidad se desplazaban por las calles de Buenos Aires al mediodía del lunes, mientras era mínima la circulación de vehículos en el centro capitalino, también por ser una jornada de feriado en Argentina.

La ola de calor abarca prácticamente todo el extenso territorio argentino.

Las autoridades difunden constantemente recomendaciones para evitar un “golpe de calor”, que afecta sobre todo a ancianos, niños y embarazadas.

Sin embargo, el SMN pronosticó que se registrarán fuertes tormentas y granizadas en la Nochebuena y una brusca disminución de la temperatura.