El recurso se hizo público hace 4 años y se practicaba en Italia, Francia y EEUU además. La grave situación económica actual lo volvió a poner de moda.
«La prostitución en España no está penada, y siempre que ambas partes estén de acuerdo esta práctica no constituye delito», afirmaba un portavoz de la policía a la colega Maruxa Ruiz del Arbol en abril de 2008, para el portal de noticias El País.
Y esta era una de las puertas de entradas del periodismo al soterrado alquiler de una habitación a cambio de sexo para contárselo al mundo. Entre ayer y hoy, el tema ha vuelto al ruedo y lo han replicado medios internacionales.
«Esto no es una violación. Cuando a ti te apetezca y a mí me apetezca», es una de las frases que los medios rescataban en aquel entonces para explicar de qué iba la cosa al resto de la población, que miraba muy de reojo el trueque del sexo a cambio de un techo.
El tema, como se apuntaba antes, ha vuelto a resurgir con fuerza en estos días en que la crisis parece no tener fin, al menos en la castigada ex «Madre Patria». Hay medidas paliativas de última hora como por ejemplo que las compañías de teléfono le ofrezcan una tarifa diferenciada a los inmigrantes, pero es lo de menos ante esta modalidad.
Y hablando de «jóvenes desinhibidos», en España hay ahorita mismo 5 millones de personas desempleadas, de las cuales 3 de cada 4 tienen desde 30 años para abajo. O sea que este trueque les vendría de maravilla y por eso el resurgir en el rubro alquileres.
Sin embargo, hay quienes como el psicosociólogo Eril Pescador, especialista español en sexología, le ven otras aristas al asunto además del trueque por necesidad. «Se cosifica la sexualidad, se está solo, cuesta relacionarse con otras personas y más si se quiere llegar al sexo, todas estas razones creo que también ayudan a impulsar el trueque sexual -dice Pescador-. Es también, como una excusa».
Los jóvenes y los pobres, los más vulnerables y por tanto los más inclinados a practicar el trueque techo por sexo, según una investigación de la cadena de noticias de la BBC. Ya en 2008, Francia, una de las castigadas del Primer Mundo por la crisis, admitía que estaba pasando por una de las mayores crisis inmobiliarias desde la II Guerra Mundial.
Ah, y no hay que olvidarse de otra tendencia que hace poco confirmaron los portales de noticias en España y MDZol.com replicó aquí: la prostitución de la juventud para bancarse la carrera universitaria. Aunque también, como confirman los colegas españoles, el recurso es empleado para proporcionarse una mejor calidad de vida.
