Los niños obesos, que ya se sabe tienen un mayor riesgo de enfermedades cardíacas y otros males en la adultez, podrían también experimentar problemas más inmediatos, entre ellos asma, discapacidades del aprendizaje y trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH), según un estudio reciente.
«La obesidad infantil no solo tiene un impacto a largo plazo en términos de enfermedad cardíaca, diabetes y otros problemas en el futuro, de los que tanto estamos escuchando», señaló el autor del estudio, el Dr. Neal Halfon, director del Centro para Niños, Familias y Comunidades Más Sanas de la Universidad de California, en Los Ángeles.
«También tiene un impacto inmediato sobre la salud, la salud mental y el desarrollo de los niños», señaló Halfon, profesor de pediatría, salud pública y políticas públicas.
Pero no está claro qué sucede primero, la obesidad o los otros problemas de salud. Tampoco se sabe si algún factor adicional podría tener algo que ver en ambas afecciones.
Para el estudio, Halfon utilizó el peso y otros datos relacionados con la salud de la Encuesta nacional de salud infantil de EE. UU. de 2007, sobre casi 43,300 niños de 10 a 17 años de edad.
El 15 por ciento de los niños tenían sobrepeso, y el 16 por ciento eran obesos. El análisis arrojó una asociación entre la obesidad y 19 medidas de la salud general, el funcionamiento psicosocial y trastornos específicos de salud.
En Estados Unidos, la obesidad infantil se ha triplicado en los últimos 30 años, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU. Alrededor de 12.5 millones de niños y adolescentes (el 17 por ciento) son obesos. Otras afecciones de salud de inicio en la niñez, como el TDAH, el asma y las discapacidades de aprendizaje han aumentado en el mismo periodo, lo que sugiere algunos vínculos comunes.
Fuente HealthDay News