Encuentra más placer en andar en silla de ruedas que en caminar y quiere romper su columna para poder utilizar las prótesis adecuadas.
Una mujer de Utah, en los Estados Unidos, se convirtió en el caso más popular del llamado Desorden de Identidad de Integridad del Cuerpo, una condición por la que desea con todas sus fuerzas convertirse en parapléjica y quedar en silla de ruedas.
Chloe Jennings-White, de 57 años, es el caso más renombrado de DIIC, una enfermedad que fue reconocida como psicopatología en 2008, informó el sitio inglés Daily Mirror. A pesar de que sus piernas funcionan perfectamente, la mujer usa una silla de ruedas para desplazarse.
“Ser capaz de usar una silla de ruedas es un alivio enorme y es lo más cercano que voy a estar de ser parapléjica”, explicó Jennings-White al sitio inglés. “El DIIC es una condición seria y durante años no entendía qué me pasaba. Ahora, por fin, sé que no estoy sola y esto me ayuda a manejar mi deseo de romperme la espalda”, expresó la mujer.
De acuerdo a Diario Tandil todo comenzó cuando Jennings-White tenía 9 años y su tía de 20 se accidentó en su bicicleta y quedó parapléjica. A partir de ese momento, la mujer intentó por todos los medios correr la misma suerte y hasta se provocó una caída similar en su propia bicicleta, pero cayó sobre su cuello y se golpeó.
“A partir de entonces me di cuenta de que me iba a romper el cuello por querer romperme la espalda e iba a terminar siendo cuadripléjica, cosa que no deseo”, explicó la mujer. Al principio, Jennings-White escondió su necesidad de andar con bastones y utilizar prótesis para enderezar sus piernas perfectas, incluso de sus padres o de su pareja, Danielle.
Pero desde que sus padres murieron y su mujer aceptó su condición como paciente con DIIC, Jennings-White se mueve con libertad en su silla de ruedas, aún teniendo la columna intacta.