CARACAS. El vicepresidente venezolano, Nicolás Maduro, afirmó que los tratamientos complementarios que recibe el presidente Hugo Chávez, hospitalizado en Cuba hace más de dos meses por una recaída de cáncer, son «sumamente complejos y duros».
«Nuestro comandante está siendo sometido a tratamientos complementarios, como hemos informado. Tratamientos ellos sumamente complejos y duros», dijo Maduro en un acto oficial, asegurando que acababa de llegar de visitar al gobernante en Cuba, en un viaje que no se informó previamente.
El vicepresidente, cuyas declaraciones fueron transmitidas por el canal oficial VTV, afirmó que Chávez está «asimilando» esta fase complementaria, «que debe en algún momento ir cerrando el ciclo del tratamiento de su enfermedad».
«Él lo está llevando adelante (su tratamiento) con espíritu de batalla», siguió el vicepresidente.
Chávez, de 58 años y operado el pasado 11 de diciembre en Cuba de una recurrencia del cáncer que le aqueja desde 2011, no aparece en público desde que partió a la isla caribeña, un día antes de su intervención quirúrgica.
El vicepresidente afirmó que en La Habana, a donde viajó acompañado del hermano del mandatario Adán Chávez (gobernador de Barinas), se reunió con la familia de Chávez y con el equipo médico que lo atiende.
Además, informó que en los próximos días el presidente del Parlamento y vicepresidente del partido oficialista, Diosdado Cabello, viajará igualmente a Cuba a reunirse con el mandatario.
Maduro también transmitió a nombre de los venezolanos todo su «agradecimiento» y «reconocimiento» al equipo médico y enfermeros «que están las 24 horas del día, todos los días pendientes del comandante, conversando con él, pendientes de su tratamiento».
En el último mes, el Ejecutivo venezolano ha insistido en que Chávez -que ha recibido las visitas de responsables oficialistas en varias ocasiones- va en «franca» mejoría y cada vez más incorporado a sus funciones de gobierno.
El 1 de febrero, Maduro aseguró que Chávez «cerró» el ciclo postoperatorio tras su última cirugía, una etapa que según el gobierno fue igualmente «compleja y dura».
Chávez, que padece desde mediados de 2011 un cáncer del que se desconoce su ubicación exacta, sufrió una infección pulmonar tras esta cuarta operación, pero según el gobierno ha sido tratada oportunamente.
A causa de la recaída, Chávez no asistió el 10 de enero a su toma de posesión, tras ser reelegido en octubre. El acto fue pospuesto indefinidamente con el aval del Tribunal Supremo de Justicia, que dictaminó que el mandatario jure cuando esté en condiciones.
Desde diciembre, el gobernante goza de un permiso de la Asamblea Nacional, de mayoría oficialista, para ausentarse de forma indefinida del país hasta que se recupere.
En estos más de dos meses de ausencia de Chávez, Maduro -nombrado por el propio mandatario como su heredero político- ha sido la cara más visible del gobierno, aunque comparte apariciones y actos de gobierno con Cabello y el canciller Elías Jaua.
Pero las decisiones importantes, como la devaluación de la moneda local que entró en vigencia este miércoles, siguen siendo tomadas por Chávez y los responsables muestran con frecuencia la firma del mandatario para demostrar que este tipo de medidas clave cuentan con su aprobación. AFP
