Para muchos, la llegada del teléfono móvil supuso la jubilación anticipada del reloj de pulsera. La hora se podía ver igual de bien en la pantalla del teléfono, incluso cuando es necesario sacarlo del bolsillo o el bolso. Ahora el reloj ha pasado a ser un accesorio de moda, no una herramienta, pero el mismo dispositivo que lo condenó podría ser su salvación.
Esta semana tanto el New York Times como el Wall Street Journal se hicieron eco de un rumor que durante los últimos meses ha crecido en la red. Apple prepara un reloj como complemento a su archiconocido teléfono iPhone. Sería un dispositivo de pulsera con pantalla de cristal curva que permitiría acceder a los últimos mensajes recibidos, ver alertas o notificaciones e integrarse con varias apps del teléfono.
Según Bloomberg hay un equipo de un centenar de personas trabajando en el proyecto en la sede de la compañía. Un antiguo empleado de Apple, Bruce Tognazzini, cree que este dispositivo podría tener además muchas aplicaciones secundarias asociadas. «Podría utilizarse como método de identificación a la hora de usar un ordenador o una tableta o como forma de pago inalámbrica -moviendo la mano cerca de un lector de radiofrecuencia-«, asegura.
Otro posible uso que han señalado varios analistas es el de medidor de actividad. El reloj podría llevar la cuenta de los pasos o las estadísticas del ejercicio físico que realiza el usuario, un campo que empieza a atraer el interés de las grandes marcas deportivas.
Otros relojes
Si Apple decide entrar en este proyecto supondría un impulso para una categoría de producto que por ahora sólo ha atraído el interés de los más tecnófilos. Hay varios ‘relojes inteligentes’ en el mercado pero los números distan mucho de los que normalmente barajan los fabricantes de móviles, informa elmundo.es, en su portal.
La empresa Pebble, por ejemplo, ha comenzado a distribuir esta semana las primeras unidades de un dispositivo parecido, al menos en espíritu, al reloj que podría estar planeando Apple. Es un pequeño reloj digital capaz de mostrar mensajes de texto y correos del móvil al que se asocia. Es también el proyecto que más dinero ha recaudado en la web de crowdfunding Kickstarter, 60.000 compradores adelantaron el dinero de la primera unidad para que los desarrolladores de Pebble pudiesen poner sus ideas en práctica.
I’m Watch es otro de los relojes inteligentes ya disponibles en el mercado. Desarrollado por una empresa italiana destaca por tener una pantalla a color y se conecta mediante Bluetooth con el teléfono. Los precios de estos dispositivos oscilan entre los 200 y los 400 euros. La consultora ABI research cree que Apple podría encontrar en cambio un mercado para millones de unidades y con un margen de beneficio bastante amplio.
Conforme crecen las pantallas de los teléfonos este tipo de relojes podrían funcionar también como una ‘pantalla secundaria’, una forma fácil de acceder a la información sin tener que sacar el teléfono del bolsillo, desbloquearlo y buscar los avisos y mensajes entre las diferentes aplicaciones y menús.
Algunos fabricantes de móviles con Android, como Motorola y Sony, han intentado entrar en este mercado, pero con poco éxito. Samsung podría estar preparando un dispositivo similar. Unas capturas de pantallas aparecidas esta semana en la red muestran un nuevo producto con pantalla pequeña y conectado al móvil, capaz de mostrar mensajes y avisos en su pantalla. Ni Apple ni Samsung han confirmado aún estos rumores pero todo apunta a que la próxima batalla entre ambas compañías no se librará en nuestros bolsillos, sino en nuestras muñecas.