La dominicana Mayra Josefina Villanueva de 43 años de edad y quien alegando haberse graduado de odontóloga en su país natal para ejercer ilegalmente esa práctica en Lawrence (Massachusetts), fue acusada formalmente ayer miércoles en la Corte Superior de esa ciudad y podría enfrentar la deportación después que cumpla la sentencia que le será impuesta el próximo 22 de abril. Villanueva mantenía un consultorio en el interior de una casa que fue descubierto al azar durante un operativo de la policía anti narcóticos a comienzos de diciembre del 2012.
Fue arrestada y las instalaciones desmanteladas por las autoridades. La dominicana que desde entonces estaba en libertad bajo fianza, se enfrenta a la deportación luego que sea sentenciada al menos a seis meses de cárcel y una multa de $1.000 dólares.
El «consultorio» lo operaba en el edificio 273 de la calle Prospect. Se le acusa de ejercer ilegalmente la práctica de la odontología y se le prohibió continuar con ella a menos que se autorizada por el estado.
El Fiscal Adjunto Kim Gillespie, el juez Kevin Gaffney instruyó a Villanueva de no violar esa condición o de lo contrario, podría ser condenada a una pena más larga.
Si es detenida por otra infracción aunque no esté relacionada con su caso, sería enviada a la cárcel por 60 días adicionales.
Villanueva les dijo a los investigadores y a la corte que se había graduado en la República Dominicana de odontóloga en 1997 y emigró a Estados Unidos en el 2001.
Nunca obtuvo una licencia estatal para ejercer la odontología. Dijo en el interrogatorio que había abierto el «consultorio» porque necesitaba dinero para sostener a su hijo pequeño.
Los investigadores dijeron que no pudieron confirmar en la República Dominicana que Villanueva se hubiera graduado en el país caribeño.
Relató a los investigadores que trabajaba con pacientes que tienen problemas con pequeños dolores en sus dentaduras, hacía cavidades de fijación, coronas cambiantes y otros procedimientos.
Pero la policía determinó que ella operaba otro consultorio ilegal en la avenida Broadway en el 2011 en el que también hacía los mismos trabajos.
La policía dijo que obviamente, la dominicana tenía esos consultorios para ganar dinero ilegalmente. Ella narró que en 1997 obtuvo el exequátur (licencia oficial) del estado dominicano y trabajó durante años para el gobierno de su país.
En el 2001 decidió emigrar a Estados Unidos, pero nunca trató de licenciarse en este país por su limitado conocimiento del inglés, asegún los documentos de la corte.
El jefe de la policía en Lawrence, John Romero, dijo que los investigadores no pudieron verificar que Villanueva era odontóloga con licencia legal en la República Dominicana.
El consultorio ilegal fue desmantelado por las autoridades luego que el detective Robert Lefebre que dirigía una fuerza especial anti narcóticos, se pusiera en contacto con el departamento municipal correspondiente.
Los inspectores de la ciudad Michael Hanson y Gregg Arvantis, se presentaron al lugar y ordenaron el cierre del consultorio de Villanueva y el desmantelamiento del mismo.
Los equipos fueron confiscados.
Encontraron una silla dental, gabinetes con suministros médicos para odontología, gavetas con herramientas para dentistas y otros instrumentos.
También jeringuillas en bolsas y otros productos odontológicos, además de sillas plásticas en una sala de espera, un libro con listas de pacientes y sus números de contacto y un talonario para recibos de pago que también fueron incautados.
Catorce fotografías fueron tomadas en el recinto por la policía que serán usadas como evidencia contra Villanueva.
Se le acusa de delito de salud pública por hacerse pasar por dentista y se le emitió una orden de comparecencia a la corte.
Por Miguel Cruz Tejada para El Nuevo Diario
