“¿Qué sentido tiene la palabra justicia cuando lo mejor de todo está reservado para unos pocos?”
Se supone que como especie dueña de la razón deberíamos tener un mejor nivel de conciencia sin embargo ese deseo se ha quedado detrás de las paredes de los intereses y las ambiciones. De que humanidad hablamos cuando el agua que necesitamos para tomar o mantener nuestra salubridad integral tiene precio, lugares de bajos recursos no saben lo que es tener agua o llega ocasionalmente.
De que humanidad hablamos cuando la comida, la vestimentas en fin todo tienen precio en este mundo salvo algunos recursos como el aire donde la manos ambiciosas de no ha llegado para intentar vendernos un aire más limpio del que tenemos.
Recientemente estuve visitando comunidades empobrecidas donde observé las mas calamitosos condiciones de vida humana, seres humanos excluidos de una vida digna, desnutridos, faltos de educación, desprotegidos de toda suerte, aferrados a la vida que cada día le impone el reto de sobrevivir.
Gobiernos de derecha y de izquierda elaborar propuestas para mejorar estas situaciones, los primeros apostando a mejorar esta situación creando mas riquezas para empoderar mas a la sociedad y los segundos apostando a superar cada uno de las problemáticas que crean condiciones de pobreza, buscando esparcir equitativamente las riquezas y despertando algunas luces de conciencia del ser humano. Ambos modelos juegan al bien y al mal, el progreso y el bienestar, el control y la libertad, pero finalmente ambas posiciones terminan solo compitiendo por poder y control deseando en todo caso no abandonarlo. No todos responden a esta posición a lo largo de la historia han existido personas y grupos que han logrados grandes logros a favor del porvenir de la humanidad.
A todo esto no podría dejar de mencionar las religiones que ante las calamidades e inseguridad de los seres humanos prometen respaldo, salvación y perdón celestial, algo superior al ser humano en creado y promovido por grupos que con natural frecuencia matan la conciencia del ser humano sembrando en su lugar devoción, temor y lealtad de la cual se lucran inmensamente. No se puede negar la existencia de religiones que si han contribuido al mejoramiento de la humanidad sin apresar conciencias ni pedir nada riquezas a cambio de esa labor.
Resulta lamentable que la especia más avanzada haya creado tales condiciones para dar un sentido administrativo a la vida, haciendo del vivir un reto y una competencia sobre quien tiene que y en qué cantidad o calidad.
Ante esta realidad de deshumanización en pleno siglo XXI observamos que los actores de la sociedad siguen jugando sus roles como si se tratara de una película donde todos tienen su guion y todos juegan a ignorar el origen del problema dejando ocultas verdades de hierro tras mentiras de papel.
El modelo de desarrollo social y económico ha estado y esta dependiente de recursos no renovables por lo que cabria pensar en el futuro de esta llamada humanidad, no hay que ser muy capacitado para visualizar que en el presente y el futuro los poderosos y sus armas de poder terminaran reservando para ellos los recursos del planeta.
La humanidad solo será humanidad cuando la conciencia sea más importante que la acción de algunos por tener control y poder.
Necesitamos una humanidad de conciencia donde se comprenda el significado de ser humanos, la responsabilidad de ser la especia más avanzada debe ser motivo para a la vez ser la que mas cuide, la que mas proteja, la que mas comprenda.
Luego de un análisis general de los seres humanos, las ideologías y sus gobiernos queda en mi mente una pregunta.. De qué humanidad hablamos ?.
Por Enmanuel Martinez
Enmanuel Martínez es un asesor y consultor en área de la comunicación política, social y empresarial. Ha trabajado en proyectos de periodismo digital, gobierno electrónico, comunicación visual, nuevas vías de comunicación y desarrollo. Asesora a directores, ministros, líderes políticos y empresariales. Martínez es analista sociopolítico y escribe regularmente con medios de comunicación. Es Egresado del programa de formación de jóvenes líderes agentes de cambio de la fundación alemana Friedrich Ebert en la República Dominicana y egresado del programa de formación de líderes de partidos políticos y sociedad civil del CEGES INTEC.
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