Santo Domingo. No deja de sorprendernos la forma en que actúa la justicia en la República Dominicana y es necesario preguntarse ¿Al servicio de quienes está nuestra justicia?.
Hago la pregunta porque vemos la facilidad con que sale de la cárcel un joven que fruto de un accidente que nadie quiere tener trágicamente termina con la vida de 3 hermanos y en menos de lo que canta un gallo ya está en la calle sin que se presente ni siquiera una foto del acusado.
Una familia destruida, una sociedad indignada y libertad bajo fianza para el hombre que según la Policía se desplazaba a una velocidad de 120 kilómetros por hora en el centro de la ciudad, el incidente ocurrió en la Jiménez de Moya, justo donde está instalado el Banco de Reservas.
El vehículo en el que el joven de 20 años Robert Boció Nova es propiedad de la parroquia Santa María Goretti según informó la Fiscalía, pero dónde están esos representantes de Dios que no han dado la cara ante la prensa haciendo un mea culpa, asumiendo parte de la responsabilidad como ente social.
¿Cómo se explica que por tener un seguro que pague la fianza de 2 millones de pesos alguien que le ha quitado la vida a 3 personas ya esté durmiendo tranquilo en su casa? La madre de estos tres jóvenes ya sufrió un pre-infarto del sufrimiento.
¿Es necesario preguntarle a la jueza que otorgó la libertad a este joven si ella no tiene familia, si en algún momento no pensó que eso pudo pasarle a alguien cercano? ¿Si con una presentación periódica y un impedimento de salida es suficiente? .
¿Al servicio de quienes está nuestra justicia?. Casi siempre nos llega a lamente la misma respuesta.