¿Exceso de Nacionalismo? O ¿temor a una invasión?

La Pobreza, la inestabilidad política y económica de nuestro vecino País la República de Haití, han sido la puerta de entrada para la llegada masiva de haitianos hacia nuestro territorio, quienes vienen en busca de oportunidades y un nuevo porvenir para dejar atrás el estado de marginalidad que les ofrece su país.

Y es que sin duda la presencia Haitiana se hace sentir en República Dominicana, para el año 2004 los investigadores británicos Bridget Wooding y Richard Moseley-William estimaron que había unos 380,000 inmigrantes haitianos, hoy, en el año 2013 se estima que hay más de un millón y ese número sigue creciendo con constante agilidad, catástrofes como el terremoto que azoto Haití en el 2010, que dejó más de 200,000 muertos y 3 millones de damnificados, han aumentado el flujo de desplazamiento de dicha población hacia el país, el cual aun no se detiene.

Muchos sectores de la República Dominicana prefieren utilizar la mano de obra haitiana, pagándole los salarios más bajos de la escala laboral, como es el caso de las construcciones, siendo 85% del total de los obreros, haitianos, según El Colegio Dominicano de Ingenieros, Arquitectos y Agrimensores (Codia), debido a que resulta más Caro trabajar con dominicanos quienes ofrecen una mano de mano obra más costosa, perjudicando esto a la economía nacional porque contribuye al descenso de los salarios de los trabajadores, lo que también se suma a una de las causa fundamentales de la llegada de Haitianos al país.

Otro elemento que incide en el desarrollo del incremento de esta población en el país, es la falta de conciencia en cuanto a la planificación familiar, para nadie es un misterio que en muchos hospitales la mayoría de las parturientas hoy son haitianas, tanto así que según el departamento de Estadísticas del Servicio Regional de Salud, del Ministerio de Salud Pública, cada 12 minutos nace un haitiano en RD, independientemente de su sexo, o si la estadía de su madre era legal o no en esta nación, generando un gasto al gobierno dominicano de unos 24 mil pesos por el nacimiento de cada bebé haitiano y lo que trae como consecuencias niños pidiendo en semáforos y vendiendo en las calles.

Sin embargo en los intentos de nuestra nación de mantener un control en el número del desplazamiento de la población inmigrante haitiana, organismos como la organización de derechos humanos, la iglesia entre otros se oponen constantemente hacia dichos intentos, como lo fue en el primer gobierno del Ex Presidente Leonel Fernández quien intento el inicio de la deportación de los inmigrantes ilegales.

¿Afectara de manera positiva o negativa a la nación dominicana la mano de obra haitiana?, ¿Hasta qué numero llegara la cifra de Haitianos en RD?, ¿Estará tomando las autoridades competentes las medidas correctas para enfrentar esta situación?, ¿Serán Positivas o negativas dichas medidas, y que impacto tendrán a nivel internacional?

Estas son preguntas que a diario nos hacemos los dominicanos, ¿las respuestas? No lo sabemos, pero guardamos la esperanza en que algún día las tendremos.

Opinión de Estefani Campos.