¿Qué te gusta hacer a la hora de la comida? Si eres de los que mira televisión o sigue frente a la pantalla de su computadora y quieres cuidar tu figura y tu salud, he aquí una nueva investigación que demuestra que la mejor alternativa sigue siendo tener sólo el plato en frente a la hora de comer, sin ninguna pantalla de por medio. Sigue leyendo este artículo y descubre por qué comer distraído podría aumentar tu consumo de calorías.
Hoy en día, es habitual estar rodeados de pantallas y estímulos que desvían nuestra atención de cualquier cosa que estemos haciendo. Esto puede tener mayores o menores consecuencias, dependiendo de la actividad con la cual esté interfiriendo. Y la hora de comer parece ser una de las más afectadas.
¿Quién no ha almorzado frente a la computadora (ordenador) en horarios de trabajo o mirando televisión durante la cena, mientras disfruta esa película de acción o romance con su actor o actriz preferida? Pasar tantas horas de nuestro día frente a una u otra pantalla no sólo fomenta el sedentarismo y la obesidad por falta de movimiento y ejercicio, sino también puede hacer que consumamos más calorías, algo que tampoco nos ayuda a mantenernos en forma ni saludables.
Al respecto, un nuevo estudio aumenta las evidencias acerca de la mala influencia que pueden tener las pantallas en la dieta. Se trata de un análisis desarrollado por unos científicos del Reino Unido, según el cual las personas que comen mientras miran televisión, juegan o leen, pueden consumir hasta 50 por ciento más calorías que quienes lo hacen prestándole atención a la comida.
Para llegar a estos resultados, que fueron publicados en el medio American Journal of Clinical Nutrition, los investigadores consideraron y evaluaron los resultados de dos docenas de estudios acerca de este tema, que habían sido publicados entre 1997 y 2011. Para incluirlos en el análisis, cada estudio debía involucrar experiencias sobre los efectos que la manipulación de la atención, la memoria y la percepción de los participantes tenía sobre la cantidad de comida que consumía.
Los estudios considerados tenían entre 14 y 122 participantes, casi todos con un peso normal (no obesos ni con sobrepeso), y 18 de las 24 experiencias incluidas en este análisis tenían a estudiantes universitarios como participantes.
Encontraron que, en promedio, comer distraídos aumenta alrededor de un 10 por ciento la cantidad de comida (y por lo mismo las calorías) que se consumen, en comparación con quienes lo hacen atentos a lo que comen, y que esta cantidad se incrementa aún más, hasta en un 25 por ciento, luego de que la persona termina de comer, informa vidaysalud.com, en su portal.
Por el contrario, recordar lo que se ha consumido en la comida anterior disminuye la cantidad de alimento (y se reducen las calorías) que se come más tarde, alrededor de un 10 por ciento. Pero el efecto no fue el mismo cuando los comensales pensaban en los alimentos que estaban comiendo en ese momento, cuando la cantidad se mantuvo sin modificaciones.
Según los investigadores, estos resultados pueden ayudar a programar planes y técnicas de control de peso que resulten más efectivas, aunque todavía hay mucho por conocer e investigar al respecto. Por ejemplo, una de las cuestiones a considerar es que estos hallazgos sólo se aplican en las personas con peso normal, ya que se considera que las personas obesas pueden tener procesos cognitivos diferentes.
Sea cual sea tu peso, ¿estás comiendo en este momento? Si es así, deja de mirar la pantalla por un instante y reflexiona. Si ya no queda nada en ese paquete de galletas que abriste más temprano y tienes el plato vacío, pero no recuerdas cuándo sucedió eso, vale la pena que evalúes tus hábitos alimenticios. Y la próxima vez que vayas a comer, no sólo es importante que tengas un menú saludable, sino también que le prestes atención a la comida. De esa forma no sólo evitarás aumentar tu consumo de calorías, sino que disfrutar más lo que comes.