El riesgo de síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL) es cinco veces mayor cuando los padres duermen con el bebé, halla un estudio reciente.
Los investigadores británicos afirmaron que dormir con el bebé aumenta el riesgo de SMSL incluso en el caso de que los padres no beban, no consuman drogas ilegales ni fumen. Aseguran de que la tasa de SMSL, la causa principal de muerte de bebés en los países desarrollados, se reduciría de forma dramática si los padres no durmieran con los bebés.
En Estados Unidos, se aconseja a todos los padres que no duerman con sus bebés de menos de 3 meses de edad. Sin embargo, en Inglaterra solo se aconseja lo mismo a algunos padres, como, por ejemplo, a los que fuman, beben o consumen drogas. Basándose en sus hallazgos, los investigadores plantearon que se necesita tomar una postura más contundente ante el hecho de dormir con los bebés en ese país.
El estudio, dirigido por Robert Carpenter, profesor en la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres, contó con los datos de 1,472 casos de SMSL y de 4,679 «controles» publicados en cinco grupos de datos distintos de Reino Unido, Europa y Australasia.
«El 88 por ciento de los fallecimientos que se produjeron al dormir con el bebé probablemente no se hubieran producido si el bebé hubiera estado acostado sobre su espalda en la cuna, al lado de la cama de los padres», escribieron los autores del estudio en un comunicado de prensa de la escuela.
Los investigadores añadieron que incluso con respecto a los bebés a los que se da el pecho y con riesgo bajo, el 81 por ciento de las muertes por SMSL de bebés menores de 3 meses de edad se podrían haber prevenido no durmiendo con el bebé. En los casos donde ninguno de los padres fumaba, el bebé era amamantado y la madre no bebía ni tomaba drogas, el riesgo de SMSL seguía siendo cinco veces mayor que si el bebé hubiera dormido en una cuna al lado de la cama de los padres. Los autores del estudio indicaron que los padres del 22 por ciento de los bebés que fallecieron de SMSL dormían con el niño en el momento en que murió.
Los investigadores señalaron que el riesgo de SMSL se reduce conforme los bebés crecen. Aun así, afirmaron, el riesgo era mucho mayor si alguno de los padres fumaba o si la madre había tomado como mínimo dos bebidas alcohólicas en 24 horas o había tomado drogas ilegales, como la marihuana, en algún momento desde que nació el bebé.
Durante la década pasada, ha habido un incremento significativo de casos en los que se duerme con el bebé; los autores del estudio estimaron que aproximadamente la mitad de los casos de SMSL se producen mientras los padres duermen con el bebé.
«No sugerimos que no se lleve a los bebés a la cama de los padres para tranquilizarlos y alimentarlos», escribieron los investigadores. «Esto se ha investigado en estudios anteriores y no se consideró que fuera un factor de riesgo, siempre que se vuelva a poner al bebé en la cuna para que duerma».
El estudio aparece publicado en la edición actual en línea de la revista BMJ Open.