Un soldado estadounidense acusado de matar a 16 afganos, entre ellos nueve niños, el año pasado se declaró culpable a cambio de librarse de la pena de muerte, informó este miércoles su abogado.
El sargento Robert Bales será juzgado en septiembre por una corte marcial por el asesinato de 16 personas, seis intentos de asesinato y siete agresiones durante las muertes, producidas en el sur de Afganistán en marzo de 2012.
La mayoría de las 22 víctimas que fueron tiroteadas tenían un impacto en la cabeza.
El abogado del sargento, John Browne, citado por el rotativo The New York Times y otros medios estadounidenses, aseguró que los fiscales militares aceptaron el acuerdo con su cliente.
El próximo miércoles está prevista una vista en la base Lewis-McChord, en el estado de Washington, donde Bales está detenido, de acuerdo con un portavoz militar.
El sargento, de 39 años, abandonó la base en la que estaba destinado en el distrito de Panjwayi, en la provincia de Kandahar la noche del 11 de marzo del año pasado para llevar a cabo los asesinatos. También prendió fuego a algunos de los cadáveres.
AFP