Más de un tercio de los matrimonios en Estados Unidos se inician con citas en internet, y esas parejas pueden llegar a ser un poco más felices que las que conocieron a través de otros medios, indicó un estudio publicado el lunes.
Las citas en línea se han disparado hasta convertirse en una industria de mil millones de dólares e internet «puede alterar la dinámica y la evolución del matrimonio mismo», señaló la investigación realizada en Estados Unidos y publicada en las Actas de la Academia Nacional de Ciencias (PNAS, por su sigla en inglés).
El estudio se basó en una encuesta representativa a nivel nacional de 19.131 personas que se casaron entre 2005 y 2012.
«Encontramos evidencia de un cambio dramático desde el advenimiento de internet en cómo las personas conocen a su cónyuge», señaló la investigación dirigida por John Cacioppo, del Departamento de Psicología de la Universidad de Chicago.
Sin embargo, algunos expertos no estuvieron de acuerdo con los resultados debido a que el estudio fue encargado por eHarmony, el sitio de citas en la web que captó una cuarta parte de todos los matrimonios en línea según la investigación.
Cacioppo reconoció ser un «asesor científico pago» para ese sitio web, pero dijo que los investigadores siguieron los procedimientos previstos en la revista de la asociación médica estadounidense JAMA (Journal of the American Medical Association), con la supervisión de expertos en estadística independientes.
Las personas que reportaron haber conocido a sus cónyuges en internet tienden a tener de 30 a 49 años y niveles de ingresos más altos que quienes no conocieron a su pareja online, indicó la encuesta.
Entre los que no conocieron a su cónyuge en línea, casi el 22% lo hizo en el trabajo, el 19% a través de amigos, un 9% en un bar o club y 4% en la iglesia, según el estudio.
¿Quién es más feliz?
Cuando los investigadores observaron cuántas parejas se habían divorciado a finales del periodo de la encuesta, hallaron que 5,96% de las parejas casadas que se habían conocido en la red habían terminado, en comparación con el 7,67% de los matrimonios que no se formaron en internet.
La diferencia se mantuvo estadísticamente significativa incluso después de verificarse variables como año de matrimonio, sexo, edad, educación, grupo étnico, ingreso familiar, religión y situación laboral.
Entre las parejas que aún estaban casadas durante el estudio, las que se conocieron en línea reportaron mayor satisfacción marital – una puntuación media de 5,64 en una encuesta de satisfacción – que los que no se conocieron online, que promediaron el 5,48.
Las tasas de satisfacción más bajas fueron reportadas por personas que se conocieron a través de la familia, el trabajo, bares o clubes o citas a ciegas.
«Estos datos sugieren que internet puede estar alterando la dinámica y los resultados del matrimonio mismo», dijo Cacioppo.
«Es posible que las personas que conocieron a su cónyuge en línea puedan ser diferentes en su personalidad, su motivación para formar una relación de pareja a largo plazo, o algún otro factor», agregó.
No siempre felicidad instantánea
Pero no todos los expertos creen que las citas en línea se traducen en felicidad instantánea.
Eli Finkel, profesor de psicología social en la Universidad de Northwestern, dirigió una extensa revisión de los estudios científicos sobre citas en internet publicados el año pasado.
El académico dijo a la AFP que coincide con las porcentajes hallados en el estudio de PNAS. Su investigación mostró que alrededor del 35% de las relaciones empiezan ahora en línea.
Finkel también mencionó la participación de eHarmony en el estudio: «Siempre me preocupa un poco cuando un proyecto está financiado en su totalidad por una organización privada que claramente tiene un interés propio en los resultados», dijo.
Según la psicóloga neoyorquina Vivian Diller, un estudio de siete años es demasiado corto para evaluar los resultados a largo plazo de las relaciones que comienzan en línea.
«El éxito en un matrimonio se debe en gran parte a la forma de negociar las diferencias, no sólo a la compatibilidad», dijo a la AFP, y agregó que las citas en línea pueden aumentar las expectativas y generar una mayor infelicidad.
afp