El hombre siempre ha buscado desde tiempos inmemoriales el elixir de la eterna juventud. Para ello ha demostrado estar dispuesto a hacer de todo, hasta un pacto con el Diablo. Estos remedios no llegan a tanto, pero algunos son bastante repugnantes.
Está la ya famosa baba de caracol, el aceite de Emú, ese ave tan parecida al avestruz, del que se dice que es tan bueno que sirve para la artritis y para hidratar la piel. También está el semen, del que se dice que es un superpotente antienvejecimiento, gracias a la espermina. Se cree que la «esperma facial ‘deja la piel con un aspecto inmaculado y sin arrugas.
– Piel de prepucio de bebé
Una compañía británica desarrolló un ratamiento para rejuvenecer y reestructurar el envejecimiento y la piel dañada, por repoblación de las capas inferiores de la piel con millones de células sanas de la piel del prepucio de bebé, repletas de colágeno y fibroblastos dérmicos humanos.
– Pata de cerdo
No es una solución para los vegetarianos, pero las patitas de cerdo son muy populares en Japón para mantener la belleza facial, por ser una gran fuente de colágeno, elemento imprescidible para mantener la elasticidad de la piel.
– Crema a base de espermina
– Jabón de leche materna
– Crema a base de placenta humana
– Veneno de abeja
– Face slimmer, invento japonés, mordida de silicona
– Baba de Caracol
– Aceite de Emú
Fuente: https://www.telecinco.es