MADRID. España. Con el correr de los días la figura del embajador dominicano en España, César Medina, se hace más impopular y crece el descontento hacia su persona entre los criollos radicados en la Madre Patria, siendo aún más notorio, luego de la denegación del plácet a su hijo, Oscar Medina, quien sería el “heredero sustituto de la posición diplomática”, según afirman cantidades de sus compatriotas y diversos dirigentes asociativos.



“Los que vivimos en España nunca nos habíamos sentido tan mal representado como en la actualidad, ya que el embajador, César Medina, no recibe a sus compatriotas, además de que raras veces se encuentra en territorio español, lo que significa un pobre servicio diplomático el que se le brinda a nuestros conciudadanos, en detrimento de la diplomacia, del pueblo y del propio gobierno dominicano” aseguró el Ing. Antonio Gómez, miembro de la Asociación de Profesionales Dominicanos en Cataluña.

Para Jimmy Ávila, presidente de la Fundación Juventud Verde, los dominicanos en España están huérfanos de representación y fustiga que se haya pretendido traspasar sus funciones a su hijo, Oscar Medina, como si de algo hereditario se tratara.



Al embajador Medina, se le acusa de falta de representatividad, desinterés ante la difícil situación que atraviesan miles de criollos castigados por la aguda crisis económica en España, a ésta se le adicionan recientes denuncias de acciones violentas contra algunos miembros de la diáspora, cuando estos formulan críticas sobre sus acciones y la pobre representación del gobierno dominicano en el país ibérico.

Tal es el caso de Ángel Languasco, presidente de la Fundación ALANCO, quien denunció que fue víctima de la soberbia “del diplomático dominicano”, al reclamar ayudas para los dolientes de una familia criolla que recientemente perdió a cinco de sus miembros en un accidente automovilístico en la ciudad de Cuenca.
Languasco, afirma haber sido agredido verbalmente y amenazado con ser “sacado a patadas” en caso de que este volviese a pisar la sede diplomática, lugar que debe ser la representación de todos los dominicanos sin miramiento a su credo político, ideológico y religioso.

De igual manera, otro caso reciente, también denunciado, fue el de la señora, doña Ceferina Rodríguez, quien se desempeñaba como empleada doméstica del embajador Medina, la que afirma haber sido humillada, también agredida verbalmente é impedida de visitar la sede de la embajada, supuestamente por el cobro de una deuda que el embajador tiene pendiente con su paisana. De acuerdo a lo expuesto por la señora Rodríguez, esta solo le pidió hacer efectivo el pago de la deuda pendiente, luego de realizar servicios domésticos “al diplomático dominicano”, quien no solo se negaba a pagarle, sino también, éste le levanto las manos en señal de agresión física; cuenta la dama sumamente indignada por el maltrato recibido.

Fuente ww.amodominicana.com