Los productores, creativos y actores de la serie hablaron de algunas de las sorpresas para los seguidores en la siguiente temporada.
El equipo artístico de The Walking Dead aprovechó la feria Cómic-Con de San Diego (California) para presentar este viernes la cuarta temporada de la serie, calificada por su responsable creativo, Scott Gimple, como «más grande, más terrorífica y con más secuencias de acción» que las anteriores.
«Es más grande, más terrorífica y tiene más secuencias de acción que las temporadas anteriores. La producción ha adquirido mayores proporciones», afirmó Gimple en el marco de la feria.
El acto, moderado por el presentador Jonathan Ross y sazonado por la presencia de un «muerto viviente», contó con la aparición de los actores de la serie (Andrew Lincoln, David Morrissey, Lauren Cohan y Norman Reedus, entre otros), así como con Robert Kirkman, creador del cómic en el que se basa la serie, y Gale Anne Hurd, productora ejecutiva.
«Creo que Scott y los guionistas han hecho un enorme trabajo en el desarrollo de los personajes esta temporada. Rick -su personaje- se da cuenta de que se está convirtiendo en un sociópata y debe renunciar a su liderazgo por el bienestar de su hijo», afirmó Lincoln.
«El cambio me ha venido bien. Me gusta interpretar facetas distintas del personaje. Rick trata de recuperar lo que ha perdido. Siento que es más humano porque se da cuenta de su responsabilidad como padre», comentó el actor, quien se congratuló del éxito de la serie y del hecho que en una serie como ésta se dispone del tiempo necesario para dar una profundidad a los personajes que el cine, en muchas ocasiones, en incapaz de ofrecer.
Acerca de la transformación de su personaje, Gimple indicó que Rick ha sufrido «traumas en su psique y en su familia» y que, por esa razón, contribuirá al grupo de supervivientes «de forma diferente».
Morrissey, que se llevó algunos de los mayores aplausos por su papel del maquiavélico Gobernador, dijo desconocer por qué le sale esa maldad «de forman tan natural».
«Me pongo el parche y desaparezco en el papel. Me preocupa», afirmó divertido. «En realidad se debe a que los guiones son fantásticos. Esta temporada mi personaje va a sorprender. Amo interpretarlo y lo que tenemos entre manos», indicó.
El británico reconoció que disfruta con el hecho de que los fans le reconozcan por la calle, aunque en algunos casos la situación alcanza niveles desproporcionados.
«Hace poco estaba haciendo fila y una mujer se puso a gritar cuando vio que yo estaba detrás de ella. Algunos incluso me dicen que les encanta odiarme. La verdad es que me lo tomo como un halago», sostuvo.
Explicó que su personaje escapó de una muerte prácticamente segura al término de la tercera temporada «peleando a muerte» con los zombis.
«Descubrió hasta dónde era capaz de llegar. Empleó una brutalidad suficiente para evitar la muerte. Ahí aprendió algo de sí mismo y lo va a llevar a esta nueva temporada», manifestó, informa cnn.com, en su portal.
Por su parte, Kirkman explicó que no considera que los muertos vivientes sean ahora más fáciles de «matar» que antes, sino que los supervivientes «llevan tiempo aprendiendo a hacerles frente», aunque, aún así, se enfrentarán a situaciones inesperadas «de las que será difícil que salgan con vida».
Hurd comentó que los protagonistas, además de los riesgos habituales, se enfrentarán a «una nueva amenaza que no hemos visto aún».
Por último, apuntó que la cuarta temporada, que arrancará en octubre con ocho episodios, contará con una pequeña pausa antes de culminar con los ocho últimos capítulos.