Santo Domingo. Mejorar la apariencia física, uno de los anhelos más comunes de hombres y mujeres de hoy, no necesariamente implica pasar por la sala de cirugía. Sin embargo, el mercadeo ha abusado de conceptos como “no invasivo” o “mínimamente invasivo” en la promoción de ciertas técnicas estéticas, y ha causado confusión en muchas personas que piensan que quien realiza dichos procedimientos no necesita licencia médica, explica el Doctor en Cirugía Plastica Franklin Peña Romero.
Según el especialista, los procedimientos como la aplicación de Botox o ácido hialurónico son menos invasivos que una cirugía, pero no dejan de serlo.
“No es una cirugía pero, como se está infiltrando un producto dentro del cuerpo, ya es invasivo. De hecho ponerle a alguien una inyección es un procedimiento invasivo. ¿Qué no es invasivo? Ponerte una crema”, dice el también profesor universitario.
Según el doctor Franklin Peña Romero, si bien los riesgos son menos comparados con los de una operación, la aplicación de Botox o ácido hialurónico sólo puede ser realizada por cirujanos plásticos o dermatólogos, “pues, como siempre hemos recomendado hay que conocer la anatomía facial y los músculos del rostro a la perfección para poder realizar estos procedimientos”.
El procedimiento para aplicación de BOTOX o ácido hialurónico no tarda más de 15 minutos y tienen un efecto que dura aproximadamente 6 y 8 meses respectivamente.
Dentro de la cirugía plástica y estética existen los procedimientos quirúrgicos y los cosméticos.
Entre los procedimientos cosméticos se encuentran la inyección de Botox y el ácido hialurónico, la dermoabrasión, el láser y los peelings químicos. De esa lista los únicos no invasivos son la dermoabrasión, el láser y los peelings químicos.
“Los procedimientos cosméticos para mejorar su imagen como el botox que es el producto más usado en el mundo para eliminar arrugas; Se inyecta en arrugas finas como las líneas de expresión, las patas de gallina la frente y el entrecejo, y produce una paralización parcial de los músculos, dando al rostro una apariencia más joven”, explica el Docto Peña Romero.
Aconseja que para surcos más profundos como los que se presentan en la zona nasolabial se emplea el ácido hialurónico, un producto de relleno que es sintético y biológicamente estudiado, lo que permite seguridad en su uso. Además está aprobado por la FDA (Food Drug Administration USA).
“Como experto puedo asegurar que éstos son los dos únicos productos que están estudiados y que a lo largo del tiempo han demostrado ser seguros”, dice el cirujano.
Explica que además, se puede usar la misma grasa del paciente como material de relleno. En este caso, sin embargo, ya no se trataría de un procedimiento tan rápido de 15 minutos, sino de casi una hora.
Usar grasa del paciente supone hacer una pequeña lipo para obtenerla del abdomen usando sedación con anestesia local, prepararla y entonces colocarla como relleno, es una excelente opción para surcos, aumento de labios y rejuvenecimiento genital. También es un procedimiento ambulatorio.
“Con respecto a la suspensión con hilos, hoy en día prácticamente ningún cirujano plástico los utiliza, método muy popular en años pasados, para estirar y rejuvenecer la expresión del rostro, pero se ha demostrado que no son efectivos”, advierte el médico.
Dice que los hilos, pueden tener el efecto deseado por algunos meses, pero producen en algunos pacientes fibrosis difíciles de corregir.
“Nuestra sugerencia es, que como su uso no es seguro lo recomendable es no usarlos ni en el rostro, ni en los glúteos”, aconseja el experto.
Para cuando los años han pasado, Franklin Peña Romero, aconseja el lifting como la técnica de estiramiento facial más efectiva y con resultados comprobados por los más de 50 años que lleva realizándose en todo el mundo.
“Es importante saber que cuando una paciente tiene entre 30 y 45 años le podemos hacer un tratamiento paliativo con Botox y rellenos, pero cuando tiene mucha flacidez en los tejidos de la cara, no se puede corregir con un hilo, sino que hay que quitar el exceso de piel y corregir la flacidez”, expresa Franklin Peña.
Franklin Peña Romero, concluye diciendo: “lo más importante es su seguridad, es por lo que en toda cirugía plástica nosotros indicamos al menos diez exámenes de laboratorio, además electrocardiograma, radiográfica de tórax, evaluación pre-anestésica, evaluación cardiovascular y respiratoria. También se recomienda acudir a un especialista acreditado por las instituciones correspondientes que en nuestro país son La Sociedad Dominicana de Cirugía Plástica, el Colegio Dominicano de Cirujanos y el Colegio Médico Dominicano.