México. Pasar muchas horas frente al computador, por cuestiones laborales o estudiantiles, anula los beneficios de la actividad física que se desarrolle en otros momentos del día, aseveró hoy el doctor mexicano Arturo Torres y Gutiérrez Rubio.
En una entrevista con Efe, Torres indicó que un estudio efectuado por el doctor Marc Hamilton, del Instituto de Investigación Biomédica Pennington, demostró que aun si una persona cumple la recomendación de la Organización Mundial de la Salud de hacer 150 minutos de ejercicio a la semana, «si se pasan ocho horas ante un monitor sigue teniendo un daño terrible».
«También ha demostrado que si se hacen pequeños cortes cada dos o tres horas, si te levantas de tu lugar de trabajo» y, en vez de ir al baño de tu oficina, vas al de dos pisos más arriba por las escaleras, ese tipo de cosas, fisiológicamente se logra un cambio fundamental», apuntó.
Hamilton presentará estos resultados en su ponencia «Fisiología de la inactividad física» en el marco del Simposio de Cambios de Conducta, que se realizará los días 5 y 6 de septiembre en Ciudad de México.
Durante el encuentro, científicos de diversos países analizarán la evidencia científica sobre el impacto de los hábitos alimentarios y de actividad física en la salud, así como los modelos exitosos aplicados en Latinoamérica para lograr cambios positivos en estas áreas.
Torres, presidente del Comité Científico del Simposio, citó otros estudios que indican además que «cada minuto de actividad física cuenta».
«Si uno hace una actividad física de moderada a vigorosa durante el día en cuestiones tan sencillas como hacer jardinería en casa o labores domésticas, o pasear a la mascota, esos minutos cuentan para tu beneficio», señaló.
Estos resultados, apuntó el catedrático en nutrición clínica y deportiva, ponen de relieve la importancia de que el profesional de la salud, «no solamente los médicos sino todos los que tienen contacto con pacientes, literalmente prescriban actividad física».
Por otro lado, Torres indicó que el objetivo del simposio es «tener un conocimiento profundo de los factores que influyen en la conducta, desde la parte funcional, que llamamos fisiológica, hasta la parte antropológica y social», de tal forma que se puedan elaborar estrategias que favorezcan los hábitos saludables.
Asimismo, los participantes expondrán programas y estrategias que han demostrado que pueden cambiar de forma positiva la conducta de los individuos.
Torres señaló que el simposio cuenta con un «cuerpo de profesores extraordinario», que incluye a Stephen Benoit, de la Universidad de Cincinnati, que participará con la ponencia «La regulación central del consumo de alimentos y el peso corporal».
Otro de los ponentes será el doctor Antonio López Espinoza, de la Universidad de Guadalajara, con la conferencia «Modificación de los hábitos alimentarios. Contribuciones teóricas y experimentales», que aborda las cuestiones que influyen, incluso desde el punto de vista cultural, en la conducta. EFE