El Fondo Monetario Internacional llamó a los países latinoamericanos a resistir la «tentación» de incrementar el gasto fiscal y a mantener la estabilidad macroeconómica para atravesar un entorno externo menos favorable, dijo este viernes un funcionario del organismo.
«Los políticos deben resistir la tentación de adoptar políticas expansionistas para corregir la moderación en el crecimiento», dijo el director del FMI para las Américas, Alejandro Werner.
En la época de bonanza, impulsada por los altos precios de las materias primas, la región aumentó el gasto público, pero «esa tendencia no debería continuar», advirtió Werner.
«El estímulo fiscal en la actual coyuntura solo debilitaría las finanzas públicas y ampliaría aún más los déficits de cuenta externa», añadió el experto en una rueda de prensa, al margen de la asamblea del FMI y Banco Mundial en Washington.
El FMI volvió a rebajar las estimaciones de crecimiento para América Latina a 2,7%, 0,3 puntos por debajo de su predicción de julio, en momentos en que la economía global se desacelera. Es la peor estimación en cuatro años.
El Fondo espera una recuperación en 2014, con un crecimiento de 3%, pero aun muy inferior a las tasas del último lustro.
La principal explicación de la desaceleración es la lenta recuperación de Brasil (2,5%) y la fuerte revisión a la baja de México a 1,2% (de 2,9% en julio).
Los países latinoamericanos se ven afectados por una caída de los precios de las materias primas y un encarecimiento del financiamiento por la anunciada regularización de las políticas monetarias de la Fed, el banco central de Estados Unidos.
En su nivel actual, esos indicadores «siguen apoyando el crecimiento, pero se están moviendo en la dirección contraria», advirtió Werner.
«Es un asunto de reconocer estos cambios de tendencia y ajustarse a ellas», agregó.
En el nuevo escenario, expertos y políticos señalan que los países latinoamericanos deben adoptar reformas para incrementar la productividad y desarrollar sus mercados internos. AFP