Un tribunal colegiado de la ciudad de Puerto Plata liberó a tres alemanes acusados desde hace un año de cometer varios delitos en un suceso que tomó ribetes de escándalo, pues se determinó el pillaje cometido por la Policía en la residencia de los extranjeros, según fuentes judiciales.
La sentencia favorece a los alemanes Peter Brunck, Daniel Brunck y Solvey Isabela Ditrich Bosen, quienes fueron absueltos de los cargos que les atribuían las autoridades de Justicia dominicanas, según informaron a Efe fuentes judiciales.
Los extranjeros estaban acusados de rebelión contra la autoridad, tentativa de homicidios y violación a la ley 36 sobre porte y tenencia de armas de fuego.
El tribunal también tomó en cuenta para liberar a los alemanes, violaciones a sus derechos fundamentales, como requisas domiciliarias irregulares que invalidan las pruebas obtenidas durante las mismas.
En sus motivaciones, el tribunal estableció que no hay pruebas suficientes para condenar a los alemanes, debido a que todas las acciones cometidas por las autoridades policiales fueron ilegales, las cuales fueron corroboradas por testigos a cargos y a descargos.
En el juicio, el Ministerio Publico representado por la fiscal titular de Puerto Plata, Alba Núñez Pichardo, solicitó la pena de 20 años de prisión para los tres extranjeros por supuesta posesión ilegal de varias armas de fuego de grueso calibre sin ningún tipo de documentación, pero el pedido fue rechazado por los jueces.
El abogado de los alemanes, José Carlos González, aseguró que los agentes policiales que participaron en el allanamiento fueron quienes entraron al complejo las armas ilegales que las autoridades dicen eran propiedad de sus clientes.
Significó que esas armas fueron presentadas como pruebas por el Ministerio Público, pero que ya «esos famosos medios probatorios» se determinó que son juegos y artefactos deportivos, todos registrados.
González dijo que «las escopetas incautadas están todas registradas debidamente en el Ministerio de Interior y Policía».
El caso en el que están envueltos los alemanes se convirtió en un escándalo nacional, tras las acusaciones de éstos de que sus residenciales fueron saqueadas por los agentes de la Policía Nacional que realizaron el allanamiento sin la presencia de los fiscales de Puerto Plata.
La Policía admitió el pillaje de sus agentes, e impuso sanciones disciplinarias contra al menos dos generales, mientras dos coroneles y un teniente fueron enviados a prisión preventiva por un año, señalados como los principales responsables del saqueo de La Mulata III.
En el allanamiento, ejecutado en octubre de 1012, murió un alemán que alegadamente enfrentó a tiros a los agentes, quienes también hirieron en las piernas a un haitiano que prestaba servicios de vigilancia en el complejo exclusivo en el que vivían los alemanes, quienes aseguran la pérdida de 60 millones de pesos (unos 1,4 millones de dólares) en el operativo.
