José Peguero 
LOS ÁNGELES. El médico de Michael Jackson, Conrad Murray, que salió de prisión el lunes, aseguró que el rey del pop, muerto en 2009, aún le amaba, y estaría indignado por los ataques de sus fans contra él.
En sus primeras declaraciones desde su salida de la cárcel, Murray dijo que nunca le había hecho daño al célebre cantante de «Thriller», muerto por una sobredosis de propofol, un poderoso anestésico de uso hospitalario que el médico le había administrado.
«Amo demasiado a Michael. Yo soy sin duda más admirador de Michael que la mayoría» de la gente, declaró Murray desde la ventana de su vehículo al sitio especializado en noticias de celebridades TMZ.
Murray, de 60 años, fue condenado a cuatro años de cárcel por homicidio involuntario, pero sólo pasó dos años tras las rejas por buena conducta.
Michael Jackson «estaría consternado, absolutamente consternado (…) al ver lo que pasa. Todos sus admiradores que me juzgan (…) Yo creo que Michael les diría que se miraran en el espejo», afirmó.
«La verdad es que yo nunca le hice mal», agregó el médico.
«Michael me ama tanto como me amaba en su momento, y sé que me ama hoy como yo lo amo a él», dijo.
AFP
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Amaury Mo