Han pasado cinco años desde el incidente, pero fue hoy que el merenguero Elvis Crespo aceptó que se masturbó frente a la pasajera Patricia Perea durante un vuelo y por lo cual el artista fue demandado.
“Sí, yo estaba borracho… Eso fue uno de los momentos donde toqué fondo. Lo que pasó este verano (en el restaurante Made in Puerto Rico) no se compara al incidente del avión. El incidente del avión fue sumamente duro. Sumamente duro y vergonzoso”, admitió el cantante durante un entrevista con María Celeste Arrarás en Al rojo vivo de Telemundo.
Elvis relató lo difícil que fue enfrentar el escándalo sexual, y más cuando estaba acabado de casar con su actual esposa, Maribel Vega.
“Sufrí muchísimo. Estamos hablando de que yo tenía apenas cinco días de casado con Maribel”, manifestó.
Crespo también contó que tuvo que enfrentarse a sus seres queridos con mentiras.
“Tuve que llamar a mi mamá… decir una cosa, un embuste a mi mamá. Llamar a mi hijo mayor y decirle un embuste, a mi papá otro embuste. Fue algo totalmente doloroso, sumamente doloroso”, sostuvo.
En la entrevista, que se dio en el marco de la promoción del disco “Una bandera One Flag”, Elvis habló arrepentido del escándalo que provocó en el restaurante de Isla Verde en el verano.
“Eso fue una recaída que no debió haber pasado, pero me responsabilizo. No debía haber pasado. Eso fue un descuido. Pero ya yo sabía desde hace varios años que no puedo tener contacto con el alcohol”, aseguró Crespo.
De la misma forma, el intérprete de Sopa de caracol confesó su adicción a las drogas.
“Me vine a enterar de que era tan talentoso a los 28, 29 años, cuando comencé a tener mi carrera como solista, que comencé a viajar el mundo, a obtener dinero, a obtener reconocimiento: Suavemente, Píntame, Grammy, y yo no estaba a la altura de las circunstancias, ni espiritual ni maduro. Al ir bajando mi popularidad, me desesperé, una ansiedad, el ego. No quería que se me fuera (la carrera). Y ahí fue que poco a poco me fui involucrando en drogas, alcohol, estupefacientes, mujeres, vicios que me fueron autodestruyendo y fueron mermando mi espiritualidad…Tú te das cuenta que hay un vacío, de que hay algo que no está bien, de que te falta algo”.
Reveló que su adicción comenzó durante su matrimonio con su primera esposa, Ana Ceruto.
“Cuando uno se autodestruye, uno piensa que se está destruyendo solo. No, por cada persona que se destruye, se lleva siete enredá, como decimos los puertorriqueños. Siete sufren también porque está la mamá, el papá, los hermanos, la familia cercana, los que realmente están ahí contigo”.
El cantante sostuvo que se perdonó, perdonó a los que le hicieron mal, pidió perdón a los que hizo sufrir y se liberó.
“No perdonar es como tratar de respirar bajo el agua. Y perdonar cuando por fin sacas la cabeza luego de un rato que te sientes asfixiado”.
El artista aseguró se está tratando para salir de sus adicciones. “Hay muchos que buscan religiones, eso está muy bien, hay muchos que buscan centros de rehabilitación que está muy bien. En mi caso me ha funcionado de una forma más grupal. Tengo excelentes profesionales trabajando comigo”.
Alegó, además que es mucho más maduro, abierto y más visionario ahora que en los años 90.
“Tuve que desconectarme del ego porque el ego es un falso ser. Tengo que entender que acaba contigo y te hace tomar malas decisiones. Es un animal violento que te devora espiritualmente hablando”.
Afirmó sentirse en excelentes condiciones en este momento. “Me siento muy bien, siento que entiendo mi vida, entiendo el por qué yo me involucré en este tipo de autodestrucción. Y todo eso, es parte de mi recuperación, en mi caminar hacia la espiritualidad. Me he dado cuenta de eso, de que uno tiene que liberarse, uno tiene que ser honesto”.
Fuente: Elnuevodiario.com
