BRASIL.- Un programa de Brasil se ha convertido en fuente de cámaras ocultas que rondan el mal gusto. Los usuarios más avezados recordarán la cámara oculta en el ascensor de la niña fantasma o el ataúd.

 Sin embargo, ahora vuelve al ruedo dando el susto de su vida a un repartidor de pizzas que, al llevar a cabo su trabajo, no espera lo que termina ocurriendo.
Destaca ElIntransigente que varios sujetos fueron víctimas cuando quisieron entregar la pizza y se dieron cuenta que en el lugar se lleva a cabo un velatorio particular, donde los presentes no sólo evitan pagar lo que corresponde sino que muestran muy poco respeto al difunto.
Al parecer, eso generó la ira del muerto que reacción de una manera impensada generando reacciones insólitas.