Desde el punto de vista de un hombre, las mujeres se enrollan bastante fácilmente. Salen una vez –con un tipo que creen que es fantástico- y después lo único que pueden hacer es pensar en él y en qué buen momento pasaron juntos.
Se sientan a esperar que él llame de nuevo. Se empiezan a preguntar por qué no llama. Y por supuesto porque se preguntan y esperan tanto, parece como si todo se demorara aún más.
“¿Debería llamarlo yo?” Antes de que empieces a comerte las uñas pensando qué hacer, piensa esto: no importa si llama o no. Si alguien no te llama de nuevo, ¿para qué preocuparse por esa persona? ¿Porqué transformarlo en algo para obsesionarte? Hasta donde sabes, se trata de solo una salida.
Si no te llama, no está interesado realmente. Esto es algo que quisiera que todas las mujeres se dieran cuenta. Si estás buscando algo sustancial, ya está. No lo persigas. No le mandes mensajes de texto todo el tiempo. No pierdas tu tiempo preguntándote cuándo te irá a llamar de nuevo.
Sé que estarás pensando, “pero David, en serio me gusta este tipo. No debería por lo menos asegurarme de que lo sepa?” Sí, ¿pero no quisieras que el sentimiento fuera mutuo? ¿No quisieras que te pueda gustar alguien que también guste de ti y que piense en ti de la misma manera?
Si tu mente divaga por él y realmente te lo preguntas, entonces sí, le puedes mandar un mensajito. Pero solo algo simple, como “hey, ¿todavía estás vivo?” o “todavía estoy en tu teléfono?” y una carita feliz . Solo si sentís que tienes que hacer algo.
Pero como hombre, sé que si estoy interesando en conocer a una mujer -más allá de solo sexo- la voy a llamar de nuevo. La voy a invitar a salir otra vez al terminar la primera cita. No me voy a ocupar con tantas cosas al punto de olvidarme de ella. Así que es momento de despertar, de no obsesionarte con un tipo que no te vuelve a llamar, y de salir a conocer otros hombres que verdaderamente te quieran conocer más.
Mantente abierta. No te encierres y te tapes con un “quizás”. Si te mantienes abierta, estarás dispuesta realmente a salir y ser receptiva para conocer otros hombres mejores.
Por David Wygant – Adaptación al castellano de Raquel Carlino
Fuente: https://www.davidwygant.com