La Defensora del Pueblo, Zoila Martínez calificó ayer de «flojo», el papel juzgado por el ministerio publico en el caso del atentado de la ingeniera Francina Hungría, por cuyo hecho perdió la visión, donde cuatro de los cincos implicados fueron descargados.
Manifestó que las fiscales adjuntas que participaron en el proceso debieron tener un papel más activo, para evitar que «esos delincuentes, quienes ya confesaron, sigan matando y atracando».
Dijo que se siente mal con el fallo de los jueces del Segundo Tribunal Colegiado del Distrito Nacional, que absolvió a Melvin Pérez (Bululo), José Miguel Mora Acosta (Gordo), Celso González Montero (Nariz), José Manuel Arias Mejía (Bacán) y José Arias y Melvin Pérez (Bolulo ) y que acudirá a la residencia de Francina a darle su apoyo.
Martínez abogó por la creación de la Defensoría Pública que asista a las víctimas, que muchas veces no tienen recursos y que la misma no dependa del Ministerio Público.
Expresó al periódico Listín Diario que que las víctimas aparte de ser maltratadas, que le quitan la vida, le roban, lo asaltan, también tienen que buscar abogados para que los defiendan, luego que son capturados los delincuentes.
Sin embargo, cuestionó el hecho de que los delincuentes cuentan con gran barra de abogados, como lo es la defensoría pública, pero que, por el contrario, las victimas no tienen a nadie.
Por otro lado, la Defensora del Pueblo favoreció la revisión del Código Procesal Penal por considerar que no se les puede dar tantas facilidades a las personas que delinquen.
Dijo no entender el porqué tantas personas que son sometidas a la justicia, acusadas de violar la ley 36 sobre porte y tenencia de armas de fuego, pueden obtener su libertad con tanta facilidad, por lo que entiende que dicha ley tiene que ser endurecida.
