SANTO DOMINGO. En el Partido Revolucionario Dominicano (PRD) se formalizó ayer la división definitiva, con el anuncio del expresidente Hipólito Mejía de que su grupo transitará en un frente opositor independiente hacia el 2016.
Este proceso viene precedido de una intensa pugna interna de tres años, desde el 6 de marzo de 2011, en la que fracasaron decenas de mediadores, entre ellos el cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, monseñor Agripino Núñez Collado, el ex presidente de Panamá, Martín Torrijos, y dirigentes de todas las tendencias del PRD.
Aunque llamó a emprender «todas las acciones que sean necesarias para rescatar el PRD de sus secuestradores», Mejía trazó un camino al margen de ese partido al instar a sus seguidores a no participar en la trigésima convención ordinaria, la cual calificó de «farsa, amañada y un simulacro» del presidente de ese partido, Miguel Vargas Maldonado.
Mejía, en una alocución que dirigió al país desde el Instituto José Francisco Peña Gómez, instó a los perredeístas a llevar sus aspiraciones a puestos electivos para los comicios del 2016 en la «Convergencia por un Mejor País», grupo que integran los partidos Frente Amplio, Humanista Dominicano, Alianza Social Dominicana y varias organizaciones independientes.
El dirigente político acusó a Vargas de mantener una actitud «arrogante y antidemocrática» que ha impedido la unidad del PRD.
Vaticinó que las elecciones del 2016 serán otro «matadero electoral» con la actual composición de la Junta Central Electoral (JCE) y el Tribunal Superior Electoral (TSE), por lo que planteó iniciar acciones puntuales para corregir esa situación.
Acusó al TSE de estar al servicio de Vargas, el PLD y el expresidente Leonel Fernández con el objetivo de desaparecer al PRD, y volvió a atribuir al «Pacto de las corbatas azules» la situación de crisis por la que pasó ese partido.
Vargas contra violencia
Destaca ListinDiario que al inscribirse ayer como candidato a la reelección en la presidencia del PRD, Vargas aseguró que está en contra de la división y la violencia en ese partido, en alusión al discurso de Mejía, aunque al ser abordado por los periodistas no quiso referirse directamente a lo dicho por el exmandatario.
«Quiero expresarles desde esta casa nacional, la casa del PRD, la casa de la democracia, que rechazamos la violencia, rechazamos la anarquía, la intriga y sobre todo rechazamos la división, nosotros estamos comprometidos con la unidad de este partido, trabajaremos para consolidar la unidad del PRD porque tenemos un compromiso con los compañeros y compañeras y con el pueblo dominicano», enfatizó.
Expuso que trabajará por la unidad de las bases y la apertura del PRD a la sociedad, de cara a los comicios del 2016.
Vargas exhortó «a todos los perredeístas a que participen en esta fiesta democrática, y hoy más que nunca estamos comprometidos con nuestro partido, con nuestro pueblo, con la democracia, con al institucionalidad y la apertura para esos jóvenes y esas mujeres que en la administración nuestra hemos podido insertar».
Prometió convertir al PRD en un partido ganador con una gerencia política efectiva que lleve a ese partido opositor a ganar la presidencia de la República, más alcaldes, regidores, diputados y senadores.
Instó a los perredeístas a trabajar con más entusiasmo que nunca por el triunfo.
De su lado el vicepresidente y aspirante a la secretaría general del PRD, Carlos Gabriel García, afirmó que Vargas es un líder democrático que ha sabido conquistar las posiciones que ha desempeñado dentro del PRD con el voto mayoritario de los militantes y dirigentes, por lo que desconocerle esa condición es sencillamente «una mezquindad política».
Mejía fue expulsado del PRD junto a Andrés Bautista el 14 de enero del 2013, donde fueron suspendidos por dos años Orlando Jorge Mera, como secretario general, y Geanilda Vásquez como secretaria de organización.
