Las vitaminas E y el beta-caroteno no brindan protección contra el cáncer y las enfermedades cardíacas, estimó un grupo de trabajo de los servicios de prevención de Estados Unidos en un informe publicado el lunes, en el que aconseja mantener una dieta balanceada como forma de cuidado.
Al actualizar un estudio que data de 2003, los investigadores agregaron a las vitaminas E y el beta-caroteno a la lista de complementos que son ineficientes para combatir estas dos enfermedades, las más mortíferas en Estados Unidos, y advirtieron que su consumo incluso pueden causar más problemas.
“El beta-caroteno puede ser dañino porque aumenta el riesgo de cáncer de pulmón en personas que ya tienen un riesgo alto” de sufrir la enfermedad, dijo el co-presidente del grupo de trabajo, Michael LeFevre, al presentar las conclusiones del estudio basado en numerosas investigaciones previas.
La presidenta del grupo, Virginia Moyer, agregó que concluyeron que no “hay evidencia para determinar si tomar sustancias nutritivas, solas o combinadas, ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares o el cáncer”.
A pesar de las advertencias regulares sobre la falta de pruebas de los efectos de las vitaminas, muchas personas las continúan tomando. Entre 2007 y 2010, cerca de la mitad de los estadounidenses adultos tomaba al menos un complemento vitamínico.
A las mujeres embarazadas se les aconseja en muchas ocasiones que tomen vitaminas que contengan ácido fólico, mientras que a los ancianos se les recomienda tomar vitamina D para fortalecer los huesos.
En lugar de tomar suplementos, el grupo aconseja mantener una dieta balanceada con frutas, verduras, cereales, productos lácteos sin mucha grasa y pescado.
AFP