Las ramificaciones en República Dominicana de la empresa estadounidense TelexFree, que se declaró en bancarrota y dejó enganchados a miles de “socios” dominicanos a través del negocio de las pirámides, no solo se limitan a La Romana y algunos sectores de Santo Domingo.

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Reportes llegados a Efe aseguran que en la provincia Peravia, principalmente en algunos de sus municipios, las estafas de TelexFree han causado la quiebra de decenas de personas que invirtieron todos sus ahorros en los “sueños en el aire” que le vendieron los activistas de la firma.

El contacto entre TelexFree y Baní sobrevino por “gravedad”, pues la empresa tiene sede en Massachusetts, EE.UU., donde los banilejos echaron raíces desde décadas y son tan populares como el famoso mango que producen.



Las informaciones aseguran que las reuniones en Baní se realizaban cotidianamente en puntos cercanos a la playa de Salinas, donde se comía y bebía “a cuerpo de rey”, con la participación entre otros, de empresarios, profesionales, inversionistas y pequeños comerciantes.

En esos encuentros, los activistas ponderaban las bondades del negocio, de lo fácil y seguro que era “multiplicar los peces y los panes”, y sobre los planes de expansión de la firma, perseguida hoy por las autoridades antifraude estadounidenses y dominicanas.

El asunto era bien cómodo, pues los interesados solo tenían que invertir desde 250 dólares y empezar a recibir sus ganancias cada semana. Para los más pudientes existía el llamado “team”, que te ofrecía el pago de 1.400 dólares a la semana, tras una inversión de 15.000 dólares.

Luego de hacer la inversión, las obligaciones de los socios se limitaban a colocar en varias páginas electrónicas anuncios que le suministraba TeleFree vía correo electrónico. Quien fallaba un día en este oficio, no cobrara al final de la semana.

Según los datos, en Baní hubo muchos que se hicieron de varios “team” y hoy están con las manos en la cabeza, como fue el caso de un propietario de una ruta de guaguas que “aceleró” todas sus inversiones hacia TeleFree.

En similar situación se encuentra el dueño de varias bancas de apuestas y el de un “dealer” de vehículos de medio uso.

“En las reuniones todo era color de rosa, y cuando surgían dudas, los activistas rápidamente las disipaban”, dijo a Efe uno de los que participaba constantemente en esos encuentros.

Como negocio piramidal, TelexFree invitaba a buscar más “socios” que, una vez involucrados, empezaban a producir ganancias para quien los alineó. Mientras más personas lograbas involucrar, mayor era la suma a recibir.

Muchos de los que quedaron “en el aire” con la empresa, lo hicieron porque creyeron en las bondades sobre el negocio que le narraban banilejos residentes en Boston.

Entre los estafados en Baní se encuentra una joven que decidió iniciarse con un “team”, y que corrió con tan mala fortuna que solo llegó a cobrar una vez.

Ante el fraude, cuyos montos aún no han sido cuantificados, las autoridades de Estados Unidos anunciaron ayer que presentaron cargos en contra de TelexFree Inc. y TelexFree, LLC, en Massachusetts, por operar un esquema piramidal de gran tamaño “principalmente contra dominicanos e inmigrantes brasileños en Estados Unidos”.

Los cargos implican “una inmediata congelación de activos” de ambas empresas, la cual, además, fue ordenada el miércoles pasado por el Tribunal del Distrito de Boston, de Estados Unidos, lo que “asegura millones de dólares de esos fondos, y evita la disipación potencial de los activos de los inversores”.

Según las autoridades de EE.UU., la pantalla de la empresa era que ofrecía un supuesto servicio telefónico basado en Voz sobre Protocolo de Internet (VoIP), cuando en realidad operaban un fraude de pirámide.

Los ingresos por ventas de VoIP de TelexFree, de aproximadamente 1,3 millones de dólares, representan apenas el uno por ciento de los más de 1,1 mil millones de dólares necesarios para cubrir sus pagos prometidos a sus promotores.

O sea, que los dominicanos “seducidos” por las ganancias “fáciles y rápidas” de TeleFree tendrán, casi seguro, que olvidarse de esos “chelitos” y antes de volver a escalar una pirámide, cerciorarse de si esta es “maya o egipcia”.EFE